marjane escribió: 26 Jul 2020, 23:04
Yo soy otra de las que me dormí cuando me pusieron la epidural. Entre que la noche anterior había dormido poco y mal, y que me pusieron 2 dosis, caí redonda. También recuerdo sentirme como en una nube, pensando "qué rica la droga esta".
Peero,
luego de cara al expulsivo, a mí aquella segunda dosis me sobró, porque apenas sentía las contracciones, ni mi cuerpo, y no sabía si estaba empujando bien. Así que en mi caso, lo de dormirme no lo veo como algo positivo.
Ojalá menos dosis para llegar al expulsivo en condiciones óptimas.
De hecho, en el segundo parto, no me la puse, y genial.
Sí, a mí me pasó exactamente igual. Me pusieron una nueva dosis porque volvía a tener contracciones muy fuertes y no me veía capaz de afrontar el expulsivo así... Y no fue buena idea, ya que yo tampoco sabía si estaba empujando correctamente y todo se ralentizó más aún.
Entre que yo apenas empujaba y que la niña tampoco bajaba, hubo que usar ventosa y la peque necesitó algo de reanimación, porque venía con vuelta de cordón y meconio, pobre mía. Menudo susto.
Por suerte, al final todo salió bien, pero a mí se me quedó un poco esa sensación de culpabilidad, de no haber aguantado sin ponerme esa segunda dosis. Estoy segura de que sin ella todo habría sido más rápido.
Si hay un segundo parto, la verdad es que no sé qué haría. Porque claro, es muy fácil pensar "no, yo voy a aguantar lo que sea", pero luego a la hora de la verdad... Yo cada vez que me venía una contracción aullaba de dolor. Así que no sé.