Bueno, pues cuento un poco.
Mi relación con la familia política (que no la considero así porque no estoy casada, pero bueno), es bastante buena, siempre que nos vemos es cordial, hablamos amigablemente, nos reímos, siempre desde el respeto y el ánimo de que las cosas fluyan. En general creo que no me puedo quejar mucho, que hay cada caso por ahí, que tela, pero sí he tenido algunos episodios con la madre de violetto que considero que no son normales y que me han sentado mal. Aunque jamás le he dicho nada ni le he mostrado que me moleste, siempre he seguido siendo amable y correcta.
Cuento algunas para que os hagáis una idea. Lo pongo en oculto porque puede ser muy reconocibles. Aviso que va tocho
- Cuando violetto y yo llevábamos unos dos años, se casó su hermana. Él estuvo durante la boda para aquí y para allá porque se encargaba de algunas tareas, yo no conocía prácticamente a nadie allí, pues la señora no me presentó a absolutamente nadie mientras me quedé sola. Me fui presentando yo a quien me iba pareciendo y su hermana sí que me presentó a algunas personas. En la mesa durante la comida, que además me sentaba en la mesa presidencial, al sentarnos violetto también se tuvo que ir, pues nada, ahí me quedé un rato en mi mundo porque tampoco es que me dieran conversación ni nada, y me tuve que presentar yo a la familia del novio que se sentaba en la misma mesa.
Al día siguiente de la boda no paraba de repetirle al marido de la hija que ya sí eran familia de verdad, que ahora sí que era su yerno. Todo esto conmigo allí delante
- Como era la boda y tal, no lo tuve en cuenta porque pensé que estaría a otras cosas, pero un tiempo después fuimos a otra historia a su pueblo e igual: lo típico de los pueblos que vas andando por la calle y te paras a hablar con la gente. Pues ella mencionaba a violetto con alguna frase tipo "sí, mira qué mayor está blablaba" y a mí ni me nombraba. La gente se me quedaba mirando en modo "y esta qué pinta aquí"?
- Con la comida, una cosa rarísima. Siempre le ponía la comida a todo el mundo antes que a mí y todo el rato ofreciéndole de esto y de lo otro a los hijos, al marido, al yerno y a mí nada. Una vez, de hecho, había cocinado un guiso que yo no como acompañado de patatas (yo no habría dicho nada y me lo habría comido tranquilamente, pero violetto le dijo que no comía eso), pues directamente no me sirvió nada en el plato. Que a ver, había queso y tal para picotear, pero yo qué sé... Hasta violetto le dijo que me pusiera algo de salsa con patatas.
- Cuando me hicieron contrato en mi trabajo después de acabar las prácticas, comimos un día juntos, yo estaba ilusionada contándoles y tal, pues lo primero que me preguntó fue por el sueldo. Cuando le dije lo que ganaba, me soltó estaba mal pagado, que su sobrino que no tenía estudios tenía un sueldo poco más bajo. Eso sí que me sentó fatal. Desde entonces, no le he vuelto a hablar de lo que gano o dejo de ganar cuando me han subido el sueldo ni lo voy a hacer nunca más.
- Ellos tienen un piso en mi ciudad, que es donde vivía violetto cuando lo conocí (bueno, técnicamente es de violetto porque está a su nombre, pero es de ellos, que para eso lo pagaron ellos
). Yo pasaba temporadas allí con él cuando aún vivía en España y cuando viene, se queda allí y yo me voy con él. Pues siempre siempre cuando se iban y nos quedábamos los dos ya solos, decía recalcándolo mucho "violetto, ahí te dejo tuppers con whatever para que
te los comas".
- Llevo casi 6 años de relación, pues jamás me ha regalado nada. Que obviamente no tiene por qué hacerlo ni mucho menos, pero un detallito para congraciarse tampoco viene mal. La Navidad pasada les mandé con violetto algunas cosas de comida navideña de mi empresa y me "devolvió el favor" mandándome una caja de bombones; ese ha sido el único detalle que ha tenido conmigo.
Este año coincidió que la noche antes de mi cumpleaños nos quedamos a dormir en su casa, pues la mañana de mi cumpleaños nada, ni un triste donut como desayuno especial por ser mi cumple. Que ya digo que no me tiene que regalar nada, pero vamos, se queda alguien en mi casa la víspera de su cumpleaños y aunque no sea nada cercano mío, por lo menos un bizcocho o algo así más especial le hago seguro.
- El verano pasado el marido nos quería invitar a comer fuera al día siguiente. Pues la señora erre que erre no, que ya había pensado en cocinar un arroz . Y no os penséis que un arroz especial para el que hubiera comprado expresamente ingredientes, no, que le puso unos champiñones y unas alcachofas de bote. Todo esto lo decía mientras comentaba lo bien que comieron en no sé qué sitio cuando invitaron a la hija y yerno a comer hacía unas semanas
Por lo demás bien y como la veo como unas 3 veces al año o así, pues sin mayor problema. A violetto nunca le había dicho nada hasta septiembre del año pasado porque los temas de la familia son espinosos, así que siempre procuro hablar bien de su familia, resaltar lo bueno que hacen y quitarle hierro a lo que no me gusta.
Peeero, cuando viene a España insiste en que los días que se queda con sus padres a dormir, que vaya yo también porque viene muy poquitos días; a mí no me hace ninguna gracia, pero normalmente cedo por él, pero en ese momento cosas entre nosotros no estaban especialmente bien y me había hecho ella algún desplante de estos recientes y no tenía el horno para bollos, así que le saqué la lista esta de los agravios que llevaba 5 años acumulando.
El último año tengo que decir que ella me está tratando bastante más normal y en general creo que no es mala mujer, pero los comportamientos estos pasivo-agresivos me tocan la moral.