Historias de gochos
1Historias increíbles de gochos. Jetas, ratas, sin control... Pasad y contad. :pasta: :pasta: :pasta:
Moderadores: lamaladelanovela, Candy Girl, Tach
Yo tuve hace mil años una suegra que tampoco se podía controlar con la comida (sobre todo dulce, pero que conste que a ella es que le debía engordar el aire ) Un día su hijo y yo, humildes estudiantes pelados de pasta, habíamos comprado unos alfajores en plan súper especial (que entonces eran carísimos, porque eran difíciles de encontrar aquí) para merendar en su casa. Los dejamos en la mesa para ir a coger bebida y servilletas, y, qué tardaríamos, tres minutos, pues la señora los había visto y ya se había comido casi todos en plan plaga de langostas, sin preguntar. Pero es que encima, cuando entramos y vio nuestras caras, suelta -“¿esto quien lo ha traído?”, -“nosotros para merendar” - “pero ¿quién lo ha pagado?” Mi novio dijo que él, y entonces la señora dijo - “ah vale” y siguió comiendo. Como si el hecho de que lo hubiera pagado su hijo le diera vía libre a zampárselo todo sin permiso. Al final pude comer uno. Joer, qué mal me caía esa mujer.
Era la primera vez que quedaba a cenar con un grupo de gente conocida y fuimos a un asador. Pidieron un par de parrilladas de carne para cenar, y como a mí no me iba mucho (carne así a palo seco no tomaba entonces), les dije que yo me pedía una ensalada de queso de cabra para mí. Pues el camarero se equivocó y trajo la ensalada al principio, como si fuera un entrante. La cogí y me la puse delante, esperando que trajeran lo de los demás para empezar a cenar. Pues un par de chicos empiezan a echarme en cara que no la pusiera al centro. Yo les explico que es que ésa es mi cena, que yo no voy a comer carne. Les da igual, y siguen diciéndome que la pase para allá. Como la ensalada es grande les digo que vale, que les doy un poco, pero les recuerdo que ésa es mi cena y que no voy a tomar nada más. Os imaginareis cómo me llegó de vuelta el plato: solo con dos o tres pedacitos de tomate y lechuga. Ni una miguita de queso de cabra, nueces y demás. Mi cara fue un poema. Por pura vergüenza no me pedí otra (pero sí postre, para comer un poco), pero no volví a quedar a tomar nada con aquella gente tan maleducada (porque es que encima, me echaron en cara que me enfadase con el detalle de comerse mi cena)
+1000TheDarkSideOfTheMoon escribió: 11 Ago 2018, 20:22 Me siento mejor persona leyendo este hilo, no me gusta que me cojan comida y por ende yo no pido del plato de los demás.
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