Diper, he terminado Maison Ikkoku.
La serie me ha gustado mucho.
En general, los personajes se hacen querer, aunque reconozco que con los vecinos tengo una relación de amor-odio. Me daba mucha pena Godai cuando era extorsionado por ellos cuando descubrieron que trabajaba en un cabaret. O le hacían otras jugarretas del estilo. Eso sí, me habría gustado que se hubiese profundizado en Akemi. Me resultó un personaje interesante. Me gustó que, en uno de los capítulos finales, confrontase directamente a Kyoko por indecisa. Reconozco que hubo veces en las que me habría liado a darle collejas a ella y Godai por tontos.
Una de las cosas con las que más me he divertido (y sufrido) de la serie ha sido los malos entendidos. Me estoy acordando ahora mismo de cuando Mitaka se compromete con la pija adinerada y amante de los perros porque se pensaba que la había dejado embarazada. Y eso que no recordaba que hubieran mantenido relaciones
Rumiko es única para meter en líos a sus personajes con una facilidad pasmosa.
La abuela de Godai
Qué graciosa me parecía. Ahí tan chiquita y la cara llena de arrugas.
Uno de los personajes que más me ha gustado es el de Yagami. Al principio me caía mal, pero después, cuando vi cómo sufría por Godai cuando este tenía problemas para encontrar empleo y quería ayudarlo (aunque a veces metía la pata bastante), hizo que terminase por caerme bien.
Otro personaje que también me gustó es el de Asuna, la pija ricachona amante de los perros. Me resultaba muy tierna la relación tan especial que tenía con ellos.
Mitaka y su sonrisa profident
También me ha gustado mucho. El pobre, qué mal lo pasaba cuando los perros se le acercaban. Las caras de pánico que ponía
Me daba un poco de apuro cuando a Kyoko la presionaban para que superase la muerte de su marido. Entiendo que lo hacían con buena intención, pero me daba la sensación de que solo servía para lastimarla.
La bebé de Godai y Kyoko
Yo seguiré viendo Mi feliz matrimonio, pero el capítulo seis me da dejado
Menudas locas la madrastra y hermanastra de la muchacha. Y luego el rubiales quemándolo todo. Ahí, ahí, defendiendo a su waifu como un rottweiler
Desde luego que me creo totalmente que haya personas así. Envidiosas, celosas, acomplejadas y deseosas de apagar la luz de aquellas personas que perciben como una amenaza.
Creo que Miyo tiene un síndrome de indefensión aprendida como consecuencia del maltrato recibido, de ahí que tenga ese comportamiento tan extraño. A ver qué pasa en los siguientes capítulos.
Missfake, no tengo ni idea de dónde se puede ver en castellano. Las webs a las que recurro para ver animes incluyen doblaje en latino y/o VOS. En mi caso, veo los animes en versión original (llegó un momento en el que no me quedó más remedio y ya le cogí el gusto). Quizás metiendo algunas palabras clave en google puedas encontrar alguna página que lo incluya.