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Y lo de la altura es puro fetichismo mío. Me molan altos y grandes.

Actúa como a ti te salga, no pienses en cómo van a actuar ellos en función de lo que tú hagas o dejes de hacer. Total, mal puede ir igualmente y bien también. Así que que te quiten lo bailao y lo follao.

nubecilla escribió: 27 Jul 2018, 14:57

Natural & Azucarada escribió: 27 Jul 2018, 14:35 Yo también me pregunto qué más quieren los tíos para ser algo más que un rollo: que estés buena, se lo pasen bien contigo, tengas conversación y les trates bien por lo visto no es suficiente. De verdad que yo si veo a uno así tiempo me falta para echarle la zarpa para siempre. Pero no, entras en su harén y así todos siempre con todas. Yo miro alrededor y el caso se repite. Y los que no tienen su harén es que los pobres son orcos de Mordor o gente que da vergüenza porque no se sabe ni comportar.

Pues lo que no quieren es pareja, entiendo yo. Es que no todo el mundo se quiere comprometer y si con estar con unos y con otros tienes cubierta la necesidad de afecto/compañía pues no vas a asumir más responsabilidades.

Yo creo que hay muchos que quieren seguir siendo adolescentes en sus relaciones a los 40 y que esto era impensable hace 10-15 años.

Opino igual, hay chicos que si les das sexo en la primera noche y si no se lo das y es lo que buscaban, también.

Mis amigas siempre me decían que el fallo era justo ese, que quizá me abriera demasiado rápido a ellos pero con otros con los que no he querido sexo por lo que fuera en la primera noche, también han desaparecido.

Así que cada uno con su táctica!

Lo ha compartido una amiga en FB y viene que ni al pelo...


http://ninfomana.tv/nos-convertimos-la- ... relaciones


Nos convertimos en la generación que no quiere relaciones



Queremos una segunda taza de café para las fotos que subimos a Instagram los domingos por la mañana, otro par de zapatos en nuestras fotos artísticas de pies. Queremos poner en Facebook que tenemos una relación para que todo el mundo pueda darle a “me gusta” y poner un comentario, queremos una publicación digna del hashtag #parejaperfecta. Queremos tener a alguien con quien ir de brunch los domingos, con quien quejarnos los lunes, con quien comer pizza los martes y que nos desee buenos días los miércoles. Queremos llevar acompañante a las bodas a las que nos inviten (¿Cómo lo habrán hecho? ¿Cómo habrán conseguido un felices para siempre?). Pero somos de la generación que no quiere relaciones.

Buceamos por Tinder en un intento de encontrar a la persona adecuada. Como si tratáramos de hacer un pedido a domicilio de nuestra alma gemela. Leemos artículos como Cinco maneras de saber que le gustas o Siete formas de gustarle, con la esperanza de ser capaces de moldear a una persona para tener una relación con ella, como si de un proyecto de artesanía que hemos visto en Pinterest se tratase. Invertimos más tiempo en nuestros perfiles de Tinder que en nuestra personalidad. Y aun así no queremos tener una relación.
Hablamos y escribimos mensajes de texto, mandamos fotos o vídeos por Snapchat y tenemos conversaciones subidas de tono. Salimos y aprovechamos la happy hour, vamos a tomar un café o a beber cerveza; cualquier cosa con tal de evitar tener una cita de verdad. Nos mandamos mensajes para quedar y mantener una charla insustancial de una hora solo para volver a casa y seguir manteniendo una charla insustancial mediante mensajes de texto. Al jugar mutuamente a juegos en los que nadie es el ganador, renunciamos a cualquier oportunidad de lograr una conexión real. Competimos por ser el más indiferente, el de la actitud más apática y el menos disponible emocionalmente. Y acabamos ganando en la categoría el que acabará solo.
Queremos la fachada de una relación, pero no queremos el esfuerzo que implica tenerla. Queremos cogernos de las manos, pero no mantener contacto visual; queremos coquetear, pero no tener conversaciones serias; queremos promesas, pero no compromiso real; queremos celebrar aniversarios, pero sin los 365 días de esfuerzo que implican. Queremos un felices para siempre, pero no queremos esforzarnos aquí y ahora. Queremos tener relaciones profundas, pero sin ir muy en serio. Queremos un amor de campeonato, pero no estamos dispuestos a entrenar.

Queremos alguien que nos dé la mano, pero no queremos darle a alguien el poder para hacernos daño. Queremos oír frases cutres de ligoteo, pero no queremos que nos conquisten… porque eso implica que nos pueden dejar. Queremos que nos barran los pies, pero, al mismo tiempo, seguir siendo independientes y vivir con seguridad y a nuestro aire. Queremos seguir persiguiendo a la idea del amor, pero no queremos caer en ella.
No queremos relaciones: queremos amigos con derecho a roce, “mantita y peli” y fotos sin ropa por Snapchat. Queremos todo aquello que nos haga vivir la ilusión de que tenemos una relación, pero sin tener una relación de verdad. Queremos todas las recompensas sin asumir ningún riesgo, queremos todos los beneficios sin ningún coste. Queremos sentir que conectamos con alguien lo suficiente, pero no demasiado. Queremos comprometernos un poco, pero no al cien por cien. Nos lo tomamos con calma: vamos viendo a dónde van las cosas, no nos gusta poner etiquetas, simplemente salimos con alguien.

Cuando parece que la cosa empieza a ir en serio, huimos. Nos escondemos. Nos vamos. Hay muchos peces en el mar. Siempre hay más oportunidades de encontrar el amor. Pero hay muy pocas de mantenerlo hoy en día…
Esperamos encontrar la felicidad. Queremos descargarnos a la persona perfecta para nosotros como si fuera una aplicación nueva; que puede actualizarse cada vez que hay un fallo, guardarse fácilmente en una carpeta y borrarse cuando ya no se utiliza. No queremos abrirnos; o, lo que es peor, no queremos ayudar a nadie a abrirse. Queremos mantener lo feo tras una portada, esconder las imperfecciones bajo filtros de Instagram, ver otro episodio de una serie en vez de tener una conversación real. Nos gusta la idea de querer a alguien a pesar de sus defectos, pero seguimos sin dejarle ver la luz del día a nuestro auténtico yo.
Sentimos que tenemos derecho al amor, igual que nos sentimos con derecho a un trabajo a jornada completa al salir de la universidad. Nuestra juventud repleta de trofeos nos ha enseñado que si queremos algo, merecemos tenerlo. Nuestra infancia rebosante de películas Disney nos ha enseñado que las almas gemelas, el amor verdadero y el felices para siempre existen para todos. Y por eso no nos esforzamos ni nos preguntamos por qué no ha aparecido el príncipe o la princesa azul. Nos cruzamos de brazos, enfadados porque no encontramos a nuestra media naranja. ¿Dónde está nuestro premio de consolación? Hemos participado, estamos aquí. ¿Dónde está la relación que merecemos? ¿Dónde está el amor verdadero que nos han prometido?

Queremos a un suplente, no a una persona. Queremos un cuerpo, no una pareja. Queremos a alguien que se siente a nuestro lado en el sofá mientras navegamos sin rumbo fijo por las redes sociales y abrimos otra aplicación para distraernos de nuestras vidas. Queremos mantener el equilibrio: fingir que no tenemos sentimientos aunque seamos un libro abierto; queremos que nos necesiten, pero no queremos necesitar a nadie. Nos cruzamos de brazos y discutimos las reglas con nuestros amigos, pero ninguno conoce el juego al que estamos intentando jugar. Porque el problema de que nuestra generación no quiera relaciones es que, al final del día, sí que las queremos.

Traducido por: Lara Eleno Romero
Vía: The Huffington Post

Natural & Azucarada escribió: 27 Jul 2018, 17:39 Yo creo que hay muchos que quieren seguir siendo adolescentes en sus relaciones a los 40 y que esto era impensable hace 10-15 años.

Esto ha pasado siempre, la única diferencia es que ahora es más fácil conocer gente. En otras épocas todavía era más normal casarse en seguida y con el primer novio, pero decir que en los 2000 era impensable no querer pareja...

Edito para decir que he leído el artículo que has puesto y tampoco me parece nada nuevo. Ni el miedo a pasarlo mal, ni el eterno soltero que no quiere ataduras, ni el liante que parece que sí pero luego que no.

Yo es que creo que realmente da igual si tienes sexo en las primeras en la primera cita o después. Vamos, que si uno solo quiere acostarse y desaparecer lo va a seguir haciendo.

Tener sexo en la primera cita no implica nada, igual que lo hacen ellos lo podemos hacer nosotras, tanto desaparecer como querer seguir conociendo al susodicho.

Que cada uno haga lo que le apetezca en el momento que le apetezca, si es que hoy en día toda opción es válida.

Reconozco que también me he marcado algunos “si te he visto no me acuerdo”, vamos que no soy una moñas. Tras éstos y los que me han hecho a mí he desarrollado la teoría esa de que hay que superar los traumas de la primera cita y crear algún vínculo más para frungir.

El artículo es totalmente lo que pasa ahora. Ya tengas 19 o 49.

Leoparda escribió: 27 Jul 2018, 23:15 Reconozco que también me he marcado algunos “si te he visto no me acuerdo”, vamos que no soy una moñas. Tras éstos y los que me han hecho a mí he desarrollado la teoría esa de que hay que superar los traumas de la primera cita y crear algún vínculo más para frungir.

El artículo es totalmente lo que pasa ahora. Ya tengas 19 o 49.

Yo creo que es un tema de que la sociedad cada vez es más superficial. Y más que vamos a ver.

Natural & Azucarada escribió: 27 Jul 2018, 23:20

Leoparda escribió: 27 Jul 2018, 23:15 Reconozco que también me he marcado algunos “si te he visto no me acuerdo”, vamos que no soy una moñas. Tras éstos y los que me han hecho a mí he desarrollado la teoría esa de que hay que superar los traumas de la primera cita y crear algún vínculo más para frungir.

El artículo es totalmente lo que pasa ahora. Ya tengas 19 o 49.

Yo creo que es un tema de que la sociedad cada vez es más superficial. Y más que vamos a ver.

Lo que dice el artîculo: queremos peces sin mojarnos el culo. Y si no te/le gustas hay más esperando a un solo clic. No hay dramas.

Natural & Azucarada escribió: 27 Jul 2018, 17:39

nubecilla escribió: 27 Jul 2018, 14:57

Natural & Azucarada escribió: 27 Jul 2018, 14:35 Yo también me pregunto qué más quieren los tíos para ser algo más que un rollo: que estés buena, se lo pasen bien contigo, tengas conversación y les trates bien por lo visto no es suficiente. De verdad que yo si veo a uno así tiempo me falta para echarle la zarpa para siempre. Pero no, entras en su harén y así todos siempre con todas. Yo miro alrededor y el caso se repite. Y los que no tienen su harén es que los pobres son orcos de Mordor o gente que da vergüenza porque no se sabe ni comportar.

Pues lo que no quieren es pareja, entiendo yo. Es que no todo el mundo se quiere comprometer y si con estar con unos y con otros tienes cubierta la necesidad de afecto/compañía pues no vas a asumir más responsabilidades.

Yo creo que hay muchos que quieren seguir siendo adolescentes en sus relaciones a los 40 y que esto era impensable hace 10-15 años.

No me citéis que editaré
Tenia bastantes mensajes sin mirar y me he puesto ‘al día’. Un chico, ponía que de 32 años, tenía puesta una foto (en la que estaba bastante bien) y por la descripción y resto de fotos parecía muy muy interesante. Pues abro conversación y me había puesto ‘tengo 48 años, espero que no tengas prejuicios con la edad’. Me he quedado un poco loquer porque estoy más cerca de los 20 años que de otra cosa. El hombre aparentaba treintaytantos eso sí

Yo llevo sin mambo desde Mayo y voy a seguir así un tiempo porque no me apetece ni que me toquen con un palo. Supongo que ha sido tanta frustración y decepciones. Al último chico que conocí, me dijo que media 1’76m, y mira... yo fui con zapatos planos y tenía mi altura (hola, yo mido 1’67m). Yo también prefiero a chicos altos (y si son corpulentos, me caso XD) pero en el rango que ponía yo (de 32 a 40), todos son de 1’75m hacia abajo. Y por no hablar de que aparentan tener 10-15 años más (la gente está súper dejada). No me considero yo un pibón, pero creo que arreglarse es importante.

Desde Junio que no tengo Tinder ni POF ni nada. La última vez que estuve en POF vi al chico que me hizo un ghosting y del cabreo me di de baja.
A POF la considero actualmente la más seria (gratuitamente hablando), por todos los datos que piden. Tinder parece más una app para cuando te aburres... de ahí que apenas hablen.

Sin palabras [mention]Natural & Azucarada[/mention] , toda la razón...

Ayer me descargué POF y me di de baja en 10 minutos del agobio que me estaban dando tantos mensajes. Es imposible de gestionar y muy invasiva. Me alucina que te obliguen a responder si tus padres están separados. Prefiero que solo me puedan hablar si hay match. En mi experiencia fue un horror.

Natural & Azucarada escribió: 27 Jul 2018, 17:39

nubecilla escribió: 27 Jul 2018, 14:57

Natural & Azucarada escribió: 27 Jul 2018, 14:35 Yo también me pregunto qué más quieren los tíos para ser algo más que un rollo: que estés buena, se lo pasen bien contigo, tengas conversación y les trates bien por lo visto no es suficiente. De verdad que yo si veo a uno así tiempo me falta para echarle la zarpa para siempre. Pero no, entras en su harén y así todos siempre con todas. Yo miro alrededor y el caso se repite. Y los que no tienen su harén es que los pobres son orcos de Mordor o gente que da vergüenza porque no se sabe ni comportar.

Pues lo que no quieren es pareja, entiendo yo. Es que no todo el mundo se quiere comprometer y si con estar con unos y con otros tienes cubierta la necesidad de afecto/compañía pues no vas a asumir más responsabilidades.

Yo creo que hay muchos que quieren seguir siendo adolescentes en sus relaciones a los 40 y que esto era impensable hace 10-15 años.

¿Y sería impensable de haber contado con los mismos medios que ahora? Porque si es por los medios que hay no son las personas las que han cambiado, la intención ya estaba pero era más complicado que se desarrollara.

De todas formas yo no lo veo así, que no quieran una relación estable, tradicional, exclusiva o monógama no los hace ser adolescentes, sólo es diferente a lo que quieres tú. La forma en que desarrollen eso sí puede ser más o menos infantil (líos, excusas, teatros, mentiras, no ir de frente, ...etc.). Pero no el que no quieran estabilidad sentimental (entendida como pareja estable), igual eso no los hace sentir bien, no es lo que quieren.
Es que cuando tratamos estos temas muchas veces tendemos a despreciar actitudes sólo por no ser compartidas y creo que es un error de base, pensar que están equivocados y que cuando vean lo que se están perdiendo van a reaccionar y si no lo hacen es que son unos incapaces. A lo mejor eso te lleva a pensar que una persona puede cambiar, aunque haya expresado sus intenciones desde un primer momento, porque claro, es que está en el camino incorrecto.
No sé si me explico, es que creo que pensar así confunde.

nubecilla escribió: 28 Jul 2018, 13:59

Natural & Azucarada escribió: 27 Jul 2018, 17:39

nubecilla escribió: 27 Jul 2018, 14:57

Natural & Azucarada escribió: 27 Jul 2018, 14:35 Yo también me pregunto qué más quieren los tíos para ser algo más que un rollo: que estés buena, se lo pasen bien contigo, tengas conversación y les trates bien por lo visto no es suficiente. De verdad que yo si veo a uno así tiempo me falta para echarle la zarpa para siempre. Pero no, entras en su harén y así todos siempre con todas. Yo miro alrededor y el caso se repite. Y los que no tienen su harén es que los pobres son orcos de Mordor o gente que da vergüenza porque no se sabe ni comportar.

Pues lo que no quieren es pareja, entiendo yo. Es que no todo el mundo se quiere comprometer y si con estar con unos y con otros tienes cubierta la necesidad de afecto/compañía pues no vas a asumir más responsabilidades.

Yo creo que hay muchos que quieren seguir siendo adolescentes en sus relaciones a los 40 y que esto era impensable hace 10-15 años.

¿Y sería impensable de haber contado con los mismos medios que ahora? Porque si es por los medios que hay no son las personas las que han cambiado, la intención ya estaba pero era más complicado que se desarrollara.

De todas formas yo no lo veo así, que no quieran una relación estable, tradicional, exclusiva o monógama no los hace ser adolescentes, sólo es diferente a lo que quieres tú. La forma en que desarrollen eso sí puede ser más o menos infantil (líos, excusas, teatros, mentiras, no ir de frente, ...etc.). Pero no el que no quieran estabilidad sentimental (entendida como pareja estable), igual eso no los hace sentir bien, no es lo que quieren.
Es que cuando tratamos estos temas muchas veces tendemos a despreciar actitudes sólo por no ser compartidas y creo que es un error de base, pensar que están equivocados y que cuando vean lo que se están perdiendo van a reaccionar y si no lo hacen es que son unos incapaces. A lo mejor eso te lleva a pensar que una persona puede cambiar, aunque haya expresado sus intenciones desde un primer momento, porque claro, es que está en el camino incorrecto.
No sé si me explico, es que creo que pensar así confunde.

A ver, que has dado por hechas demasiadas cosas y estás mezclando mi historia personal con mi visión de la sociedad. Son dos cosas diferentes.


1) Yo no he dicho que busque una relación seria a toda costa. He conocido a alguien que me ha gustado mucho y que me ha transmitido cosas. Algo que tampoco me pasa frecuentemente ni con muchos otros Tinders.


2) Cada uno puede establecer el tipo de relación que quiera a lo largo de toda su vida.

3) Mi visión sobre las relaciones sociales y amorosas es que casa vez son más superficiales y de usar y tirar. Se queman balas como nunca antes porque es muy fácil obtener un respuesto. Y el ser humano del mundo moderno se ha vuelto un consumidor insaciable no de objetos sino también de personas.

ficho! No sé ligar en la sociedad actual... hay alguna app para “asociales”?

Pero es que hoy en día muchos hombres, especialmente en las aplicaciones, no buscan algo serio. Precisamente en el mundo gay se complica lo de encontrar pareja porque la gran mayoría no está interesa en comprometerse.