rose84 a mi del año pasado a ahora me ha tocado volver a conducir sola trayectos largos.
El año pasado por estas fechas empecé a sentarme en el coche de mi pareja, sólo hacer eso. Quería volver a conducir aunque fuese un poquito. Además él me dijo que por Navidades me iba a regalar el coche viejo que tenía, que era medianito. Cuando me llamó para confirmarme que me lo regalaba me puse a llorar porque pensaba que menuda vergüenza rechazar una oportunidad así pero cómo iba a tener yo un coche si me daba pánico usarlo. Casi 10 años sin sentarme al volante.
Como estaba con mi psicóloga entonces, se lo comenté para elaborar plan de enfrentamiento. La idea era empezar sentándome en el coche, colocar el asiento, los espejos... etc. Sólo hacer eso al principio, aún con alguien a mi lado, me echaba a llorar y temblar de la ansiedad que me daba.
Poco a poco fui sentandome con más entereza, luego cambiamos a pasitos pequeños de usar el coche 5-10 minutos por una zona muy poco transitada con algunas rotonditas muy chiquititas y calles bien iluminadas. Igual, de empezar llorando, llegar a los cruces de calles y pensar que no podría...
En enero se nos planteó la oportunidad de ir a vivir fuera de la ciudad donde estaba, pero necesitaría coche o chofer para casi todo, tengo autobús pero pasa cada hora y pico. La ansiedad que me daba pensar que tendría que conducir fue horrible, pero poco a poco seguimos haciendo prácticas con el coche de mi chico y yo. Recuerdo que a finales de febrero/primeros de marzo ya tenía que llevarme el coche a mi casa porque no tenía sentido dejarlo en casa de él (vivía en una ciudad distinta a la mía, no muy lejos). Por lo que hablé con mis padres para que fuesemos allí en el coche de mis padres y volverme yo en el que ya era mi coche con mi madre de copiloto.
Volvimos muy despacito juntas, yo conduciendo y con mucho miedo y mi padre detrás con paciencia infinita.
Durante ese tiempo hasta que hicimos la mudanza en mayo, durante dos meses, empecé a conducir más. Al principio con mi madre o una amiga o mi pareja de copiloto. Me iba a zonas donde sabía que no había mucho tráfico y con sitios para aparcar y así practicar. Música que me relajase, mucha paciencia por parte de mis copilotos y mucho tener que pararme a bajar del coche y llorar de los nervios. Siguiendo las pautas de mi psicóloga.
Llegó un punto, a finales de marzo/principios de abril que decidí coger el coche sola para ir a la sesión con mi psicóloga. En transporte público tardaba casi 50 minutos, en coche era sólo 15. Sabía de antemano que la zona para aparcar allí estaba bien, y conocía el recorrido que tenía que hacer al dedillo porque lo había practicado mucho. Avisé a mi madre, a mi amiga, a mi pareja y a tropecientas personas más. Literal que compartiendo ubicación en 3-4 chats y pidiendo que por favor tuvieran el móvil a mano. Si tenía la sesión a las 18 a las 17 bajé al coche. Y ritual que ahora siempre hago: Me siento, me pongo el cinturón, repaso espejos, altura, distancia. Da igual que nadie lo haya cogido entre medias, siempre lo reviso. Conecto el móvil al coche, pongo música relajante, comparto ubicación (a día de hoy sigo haciéndolo) y conecto el google maps. Y muy despacito empecé a conducir de camino a allá.
Recuerdo el miedo a incorporarme a la carretera principal, o al coger la salida y hacer cambio de carril, de pensar que si se pondría el semaforo en rojo y no me diera tiempo a frenar, o llegase y no supiera aparcar. Y bueno, ese día todo guay.
Recuerdo que salí y tenía pánico de pensar que tenía que hacer la vuelta y si sería capaz. Pero ahí pensé una estrategia que sigo aplicando a día de hoy: metas cortitas. Si mi trayecto es de 30 minutos, ir dividiéndolo en zonas chiquititas: Primero al semáforo, luego llego a la incorporación, después el cambio de carril, luego la salida, después a la glorieta, luego al giro de mi calle... Suelo mirarme siempre los trayectos antes de salir para saber lo que me espera.
La prueba de fuego fue llevar el coche con la mudanza sola. Aunque iba mi pareja con su coche detrás, yo iba en el mío con cajas hasta las cejas. La ansiedad y no saber si le perdería por el camino. Nos pusimos en llamada y poco a poco a hacer kilómetros. Recuerdo que una de las noches era la una de la madrugada, con lluvia y viento y tenía mucho miedo. Que me dijo: Si tenemos que parar el coche en el arcén y volver en sólo uno, lo hacemos así. Ve conduciendo y yo voy detrás siguiéndote, tú marcas el ritmo.
Y poco a poco, la realidad es que a día de hoy y a pesar de llevar ya muchos km hechos aún a veces pienso lo fácil que es matarme o tener un accidente. Con ese cochecito además tuve varios sustos de que se quedó parado de camino a otra ciudad y me tocó llamar grúa y otra vez que fui a salir y no cerraba el mando (no fue la pila, tocó llevarlo al concesionario a arreglar) y dejar el coche abierto en la calle toda la noche.
Finalmente en septiembre no daba más de sí y me tocó comprarme uno nuevo. Escogí uno chiquitito, con un montón de sistemas de seguridad (control de carril, airbags en todas partes, aviso de colisión, control de peatón/ciclista) y automático. Suficiente tengo con llevar la atención en carretera que acabo exahusta como para encima las marchas, jajaja. Aún me emociono pensando que hace un año me echaba a temblar y no quería sentarme en el asiento del piloto y hoy tengo mi cochecito y hago cositas sola.
Se puede salir chicas, os lo prometo. Da mucho mucho miedo, yo a día de hoy si tengo que ir sola se me ponen las manos heladas de los nervios durante un buen rato, pero llega un momento en el que , a pesar del miedo, lo haces. Hablar con personitas que os puedan echar una mano, con sus coches o su compañía de copilotos. Que no les importe que vayáis despacito o que tengan que conducir si se da el caso. No pasa nada por sentirse avergonzada por tener miedo o ansiedad, no sois menos por no ser capaces mientras otras personas no les cuesta nada o "lo consiguen". Me ha costado 10 años sin coger un coche sentarme y no romper a llorar. Poquito a poco.
Perdón por el tocho, gracias si habéis leido todo entero