Ahora llego a contar la boda espeluznante.
Era una boda de mañana. Estaba prevista para las 12h pero a las 10h teníamos que estar todos en la finca donde se celebró. Nadie sabíael motivo de tener que estar tan pronto. Al llegar, nos recibió una de las tres organizadoras y una de las hermanas de la novia. Estábamos 110 personas.
La madre de la novia le había contado a mi abuela que habían invitado a 250, hasta completar aforo, pero después de ver el regalo de muchos, les habían dicho que estaban desinvitados, que con ellos perdían dinero y no querían pagar un fiestón memorable a esos ratas. Nosotros le dimos 150€ por persona, y además tuvimos que pagarnos el alojamiento para dos noches porque la novia tenía la ilusión de casarse a 400km de nuestro pueblo. No nos desinvitó, así que pensaba que el regalo le había parecido bien.
Nos acaban de recibir en la finca y nos comunican que solo tenemos una hora y media para aprender y ensayar un baile. Teníamos que hacer un flashmob para recibir a la novia cuando llegara a la finca. Emepzaba a hacer demasiado calor y no nos habían dado ni una botella de agua. Lo hicimos para evitar el mal rollo. A las 11h30, pasa un camarero con botellas de agua y nos mandan a nuestras posiciones porque el novio está al caer. Poco antes de las 12 llega el novio, en helicóptero. Aterrizó en la plaza de toros de la finca, y en cuanto recorrió la poca distancia que había hasta la gente, tuvimos que hacer el flashmob por primera vez.
La novia llegó una hora tarde. En coche de caballos. Tuvimos que repetir el flashmob. Llevaba un tocado como el de Carmina Ordoñez cuando se casó con Paquirri y un vestido como el de Elsa, de Frozen. Las 6 damas de honor llevaban un vestido azul claro inspirado en el vestido de novia de Lourdes Montes (la mujer de Origen), ese que llevó en su ceremonia religiosa, con los cristales colgando.
Esto ya lo sabía porque su madre se lo había contado a mi abuela.
La ceremonia duró una hora y media. Otra de las hermanas de la novia fue la encargada de oficiarla. Cada una de las damas de honor leyó
un discurso. La madrina, el padrino y los dos mejores amigos del novio también leyeron un discurso. 14h30 de la tarde y no habíamos comido nada desde el desayuno. Tampoco habíamos bebido nada desde el agua de las 11h30. Estábamos al aire libre, con 40°C más o menos.
Por fin llega el cóctel. Sólo había un jamón para 110 personas y poca variedad de aperitivos. Estuvimos así dos horas, porque los novios tenían que hacerse fotos. A las 16h30 pasamos al comedor. La novia se cambió de traje. Llevaba un vestido de Pronovias de corte sirena, con escote en pico y la espalda al descubierto. Se cambió el tocado y se puso la diadema de brillantes falsos que le dieron cuando quedó finalista en el concurso de Miss de la provincia.
Lo de la diadema no me lo esperaba
La comida también fue escasa: un entrante de crudités, una carne deshuesada y un helado. Luego hubo una taza de café. Para mí, como avisé que estaba embarazada, me dieron una tapa de fideuá y de postre, una sola bola de helado de vainilla. Mi marido me cedió su carne, su pan y su postre porque estaba muerta de hambre.
A eso de las 19h, dan por terminada la comida. Las damas de honor le habían preparado varios juegos para hacerle la comida más especial y darle una dosis extra de protagonismo.
Luego cuento lo que falta que tengo ginecólogo.