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por LeFreak
Gracias [mention]abril_zaragoza[/mention]
Respecto al último párrafo de quien inició esta conversación por alusiones respondo que podría resumirse en la frase de Elbert Hubbard “Si no puedes responder al argumento de un adversario, no está todo perdido: puedes insultarle”.
“Cállate ya, que con lo feo que eres mejor que te encierres en tu casa y no salgas”
De esta forma, quien insulta, ante la superioridad del adversario o la imposibilidad de responder con argumentos, pretende, a través del recurso al insulto, que aquel guarde silencio o que pierda su credibilidad. Para ello, se recurre a cuestionar el físico, la inteligencia, el carácter, la condición, o la buena fe del oponente.
Curiosamente, esta falacia tiene gran predicamento por una sencilla razón, cual es que cualquiera es capaz de utilizarla, y además, ante un público o auditorio proclive (amigos, familiares, etc.), causa un gran efecto, generando el desconcierto y la pérdida de control del adversario, quien ante el insulto gratuito e injustificado suele entrar en la batalla verbal, perdiendo toda su concentración.
Extracto del blog de Oscar León:
Señala Damborenea en su Diccionario de Falacias, que hay quien emplea esta falacia Ad Personam antes de escuchar el argumento del contrario, “en una maniobra que coloquialmente se llama envenenar el pozo, es decir, no se quiere dejar agua para cuando llegue el contrincante, negando que esté cualificado para dar una opinión”. De esta forma, se predispone al auditorio frente a quien pretende iniciar su argumento.
De esta forma, desacreditaremos a la persona del adversario y a su capacidad de argumentar, pues desarmado, no encontrará lo que nunca construyó en su mente: un argumento.
Un ejemplo de esta actitud la encontramos en Temístocles de Plutarco, cuando aquel dice a Euriabiades
“Golpéame pero escúchame”
O cuando a Borges le lanzaron a la cara un vaso de whisky y dijo:
“Eso es una digresión. Ahora espero su argumento”
O cuando una forera increpa a otra:
Si tú no lo hubieses torcido desde el principio con un tono agresivo y maleducado que no venía a cuento. Así que supongo que lo que escribes más arriba, lo dices pensando en ti y en los insultos de las otras dos o tres foreras que se han picado porque quieren ser especiales y se han encerrado en el "¡envidiosa, resentida!".
Es una avance que os deis cuenta de vuestros errores. Por ahí se empieza.......
Algunos aquí partimos de unos principios de base antagónicos hacia quien inició la conversación. También soy de la opinión de que no será fácil reconducirla.