Ir a cualquier zapatería infantil y ver qué tipo de zapatos ofrecen a niños y niñas es una muestra perfecta de lo que se espera de ellos. Tenemos tantísimo que luchar contra los estereotipos de género... Mi hija NO quiere zapatos de princesa, quiere zapatos para trepar y correr!

La Guiri@laguiri
En un parque infantil. Me llama la atención la variedad, y en algunos casos mala calidad, del calzado de las niñas.

Niños: deportivo genérico. Náutico. Deportivo de fútbol. Deportivo de lona con suela gruesa y blanda.

Niñas: deportivo genérico. Sandalias de calidad. Chanclas. Bailarinas de tela con suela plana y fina de plástico rígido.

Creo que está bastante claro que quienes se quejan de la mala calidad de sandalias o chaquetas no protestan exactamente del rosa o los unicornios, sino de que es más incómoda y de peor calidad que la ropa azul con dinosaurios y camiones. Y a veces más cara.

Y no sé por qué os molesta tanto que se diga. Es así.

Es imposible negar que en México o en América Latina muchas madres le prestan más atención a los hijos varones que a sus hijas.

Hay estudios que demuestran que las madres amamantan más a los bebés varones que a las niñas. Y eso está inscrito en el lenguaje común. Se le dice al hermano hombre: "Cuida a tu hermana", y a la niña se le dice: "Atiende a tu hermano".

Y esto es algo que las madres están alimentando todo el tiempo.

Shivani no sabe cuánto costó, pero sí que su marido la compró para que fuese su esposa. La escasez convierte a las mujeres en mercancía en el norte de la India. Seis millones de niñas han sido abortadas en la última década en el país asiático. Y la negligencia en el cuidado de las niñas que nacen impide que muchas celebren su quinto cumpleaños. Esto Shivani lo sabe bien. Una de sus hijas murió al año porque el padre y la abuela consideraron una mala inversión pagar a un médico. Las medicinas y la comida son para los varones, que continúan el linaje familiar, reciben dote matrimonial y serán la pensión de los padres. En toda la India faltan 34 millones de mujeres. Un genocidio silencioso bautizado como «generocidio».

Contra todo pronóstico, la prosperidad económica y el aumento de los niveles de educación favorecen la eliminación de niñas.

La tasa de mortalidad entre las niñas indias es 40% más alta que en los niños, según UNICEF. La idea de que una hija es «plantar una semilla en el jardín del vecino» —ya que en el matrimonio pasa a formar parte de la familia del marido— conduce a que las niñas sean peor alimentadas y reciban menos cuidados médicos.

La investigación médica indica que la lactancia materna suprime la fertilidad posnatal. Modelamos las implicaciones para las decisiones de la lactancia materna y probamos las predicciones del modelo usando datos de encuestas de la India. Primero, encontramos que la lactancia materna aumenta con el orden de nacimiento, ya que las madres cercanas o más allá de la fertilidad total deseada tienen más probabilidades de hacer uso de las propiedades anticonceptivas de la lactancia. En segundo lugar, dada la preferencia por tener hijos, las madres con ninguno o pocos hijos quieren volver a concebir y, por lo tanto, limitar su lactancia. De hecho, encontramos que las hijas son destetadas antes que los hijos, y, además, tanto para hijos como para hijas, tener pocos o ningún hermano mayor resulta en un destete más temprano. En tercer lugar, estos efectos de género alcanzan su punto máximo a medida que las madres se acercan al tamaño de su familia objetivo, cuando su decisión sobre la futura procreación (y por lo tanto la lactancia materna) es muy marginal y más sensible a consideraciones como la composición s*xual ideal.

Debido a que la lactancia materna protege contra las enfermedades transmitidas por el agua y los alimentos, nuestro modelo también hace predicciones sobre los resultados de salud. Encontramos que los patrones de mortalidad infantil reflejan los de la lactancia materna con respecto al género y sus interacciones con el orden de nacimiento y el tamaño ideal de la familia. Nuestros resultados sugieren que la brecha de género en la lactancia materna explica el 14 por ciento del exceso de mortalidad de niñas en la India, o alrededor de 22,000 "niñas desaparecidas" cada año.

La película muestra continuamente juguetes infantiles inocentes, niños en columpios, pero también un uso ominoso de juguetes, con los cómics religiosos, los videos de combate cristianos y las muñecas del feto. Grady: Con los juguetes y columpios, queríamos recordarles a todos que estos son niños, que estos son realmente infancias. Pero la forma en que distribuyen las pequeñas muñecas rosadas del feto es genial. Es muy efectivo. Los niños están obsesionados con sus madres. "¡Esta mamá no quería a su bebé!"

¿Qué pasa con la acusación de que este entrenamiento limita con el abuso infantil, especialmente porque estos niños son educados en el hogar y no tienen acceso a otros puntos de vista? Ewing: dos tipos de padres educan en casa: conservadores de extrema derecha y de extrema izquierda, los hippies. Cualquier persona en una situación extrema desea eliminar a sus hijos de la corriente principal. Ese es su derecho. Pero no puedes proteger a alguien para siempre. Eventualmente van a interactuar con el mundo exterior, y la esperanza de los padres es que sus hijos se mantengan fuertes y sean para Dios. https://filmmakermagazine.com/archives/ ... ly_war.php

El lavado de cerebro, también conocido como reforma del pensamiento, educación, adoctrinamiento o reeducación, consiste en la aplicación de diversas técnicas de persuasión, sean coercitivas o no, como la concesión selectiva de recompensas. ​ Mediante esta estrategia psicológica, el domante obliga someter sus creencias, conducta, pensamientos y comportamiento a un individuo o sociedad, con el propósito de ejercer sobre ellos reconducciones o controles políticas, morales y cualquier otro tipo. https://es.wikipedia.org/wiki/Lavado_de_cerebro

Hacer luz de gas o gaslighting es una forma de abuso psicológico que consiste en presentar información falsa para hacer dudar a la víctima de su memoria, de su percepción o de su cordura. ​ Puede consistir en negaciones simples por parte del abusador, en el sentido de si determinados eventos ocurrieron o no, o incluso en la escenificación de situaciones extrañas con el fin de desorientar a la víctima. https://es.wikipedia.org/wiki/Hacer_luz_de_gas

La suposición de que los niños no leerán acerca de las niñas, o ven programación sobre niñas está muy arraigada en los medios y las industrias editoriales, pero la evidencia es débil y está atrasada para ser desafiante, como describe el autor John Dougherty en esta publicación. ¿Por qué creemos estas cosas?

Para empezar, simplemente no es cierto: los niños pueden, por supuesto, interesarse en las historias sobre las niñas, como nuestra galería de "Niños leen niñas", y las contribuciones a este proyecto Guardian Witness mostraron. Autores como Rob Biddulph cuentan cómo los niños y las niñas han amado sus historias dirigidas por niñas.

Lamentablemente, con demasiada frecuencia, a los niños se les hace sentir que no se les permite mostrar interés en las historias de las niñas. Y la investigación realizada por las organizaciones de medios o editores no necesariamente profundiza en esto, a menudo investigando con niños en grupos de un solo sexo, o preguntándoles sus opiniones frente a sus compañeros.

Una anécdota contada en la Conferencia de Medios Infantiles hace un par de años por la ejecutiva de PBS Linda Simensky es contundente: en un grupo de enfoque preguntó a un grupo de ocho chicos cuántos de ellos vieron Power Puff Girls, un programa de dibujos animados sobre chicas superhéroes. Solo un niño levantó la mano. Más tarde, la pregunta se hizo nuevamente, pero esta vez se les pidió que miraran hacia abajo en sus vueltas, sabiendo que los otros muchachos no podían ver su respuesta, y siete de los ocho dijeron que vieron el programa.

Pero lo más importante, si los niños no están seguros de si se les permite identificarse con un personaje femenino, esto es preocupante, y algo que tenemos que resolver es cómo superar, no solo aceptar pasivamente. No está bien que el mundo de los adultos refuerce la idea de que es de alguna manera degradante para un niño interesarse por lo que una niña podría hacer, pensar o sentir.

El público objetivo principal para los libros ilustrados es demasiado joven como para tener una opinión fuerte sobre si los personajes principales son hombres o mujeres, por lo que un sesgo de género en los libros y medios a esta edad es probablemente un factor clave en la configuración de esto.

"Verás, no sé ninguna historia. Ninguno de los niños perdidos conoce ninguna historia ".

"Qué terrible", dijo Wendy.

"¿Sabes?" Preguntó Peter "¿por qué las golondrinas se acumulan en los aleros de las casas? Es para escuchar las historias. O Wendy, tu madre te estaba contando una historia tan encantadora ".

"¿Qué historia fue?"

"Sobre el príncipe que no pudo encontrar a la dama que usaba la zapatilla de cristal".

"Peter", dijo emocionada Wendy, "eso era Cenicienta, y él la encontró, y vivieron felices para siempre".

Peter estaba tan contento que se levanto del suelo, donde habían estado sentados, y corrió hacia la ventana.

"¿A dónde vas?", Exclamó con recelo.

"Decirle a los otros chicos".

"No vayas, Peter", suplicaba, "conozco tantas historias".

Esas fueron sus palabras precisas, por lo que no se puede negar que fue ella quien lo tentó por primera vez.

Regresó, y ahora había una mirada codiciosa en sus ojos que debería haberla alarmado, pero no lo hizo.

"¡Ah, las historias que les podía contar a los niños!", Gritó, y luego Peter la agarró y comenzó a atraerla hacia la ventana.

"¡Déjame ir!", Le ordenó.

"Wendy, ven conmigo y díselo a los otros chicos".

Por supuesto que estaba muy complacida de que se lo pidieran, pero ella dijo: "Dios mío, no puedo. ¡Piensa en mamá! Además, no puedo volar ".

"Te enseñaré."

¿sabes qué es salvaje? que el tropo de "mi padre siempre quiso un hijo, por eso me trató a mí, a su hija, como a un niño" es tan popular y amado de bajo perfil, pero si alguna vez viste a una madre que hablaba de lo mucho que quería una hija en vez de un hijo, o si ella trató a su hijo como una niña, como ??? la gente pensaría que ella es horrible y ese pobre chico ??

Me pregunto por qué es eso

Este último es literalmente el argumento de algunas películas de terror.

"La socialización de género femenino se reconoce fácilmente como abuso en el momento en que se hace a un niño varón"

"Las niñas pueden usar jeans y cortarse el pelo corto y usar camisas y botas porque está bien ser un niño; para las niñas es como una promoción. Pero que un niño parezca una niña es degradante, según tu, porque en secreto crees que ser una niña es degradante ".

Las niñas pueden usar jeans y cortarse el pelo, usar camisas y botas, porque está bien ser un niño, pero que un niño parezca una niña es degradante, porque piensas que ser una niña es degradante. Pero en secreto, te encantaría saber cómo es, ¿no? ¿Lo que siente al ser una chica?

"Una cárcel no es el Hilton", asegura Joe Arpaio, de 77 años, el sheriff del condado de Maricopa (Arizona). Acusado de acosar a los inmigrantes hispanos, de racismo, de estar obsesionado con la persecución de los sin papeles, Arpaio es uno de los personajes más citados, a favor y en contra, en el debate sobre la nueva ley de inmigración de Arizona. Su mayor hazaña es una cárcel de tiendas de campaña en Phoenix en la que los presos son obligados a llevar ropa interior rosa. "Aquí estoy, por andar con los papeles de otro", señala uno de los internos, la mayoría de los cuales son mexicanos.

La explicación de la ropa interior rosa es que así "los presos no la roban y no pierden dinero los contribuyentes", continúa el sargento.

El rosa no es un color de éxito. Ninguna victoria se asocia al color rosa porque no está considerado como un color de líderes. Únicamente en el Giro de Italia se premia al ganador con el maillot rosa, que adopta su tono de las páginas del periódico milanés que organiza la carrera –La Gazzetta dello Sport–.

Con el rosa a juicio. La Administración de Estados Unidos tuvo que regular los colores con los que se pintaban los vestuarios de los equipos de rugby. Los visitantes se quejaban de que siempre perdían cuando se instalaban en vestuarios pintados de rosa, a raíz de lo cual la norma exigió que el vestuario de los locales se tiñese siempre del mismo tono que el del otro equipo.

Stark Raving Dad, llamado Papá, loco de atar en España y Papá está loco en Hispanoamérica, es el primer capítulo perteneciente a la tercera temporada de la serie animada Los Simpson, emitido originalmente el 19 de septiembre de 1991

Bart lava su gorra roja en la misma lavadora en donde Homer estaba lavando su camisa y ropa blanca del trabajo. Como la gorra destiñe, a Homer no le queda otra opción que ir a trabajar con una camisa blanca teñida de rosa. En el trabajo, Homer es el hazmerreír de todos en la planta por su camisa rosa, el Sr. Burns detiene a Homer por pensar que es un "anarquista de pensamiento libre" y él explica insistentemente lo del accidente en su lavadora y Burns no le cree. Homer, sin escape, es examinado por el Dr. Marvin Monroe, quien le da una lista de veinte preguntas que debe responder y devolver. Sin embargo, Homer no quiere contestar él mismo su prueba y se lo pide a Marge, quien se niega. Luego acude a Lisa, la cual le propone contestar su prueba si antes Homer escucha un poema algo monótono que había escrito por motivo de su cumpleaños. Finalmente Bart responde las preguntas, completamente mal. Los resultados negativos hacen que Homer deba ser internado en un sanatorio mental, en donde comparte una celda con un hombre alto, blanco y gordo, quien se cree Michael Jackson. Como Homer no sabe quién es Michael Jackson, le cree.

En pasados días se ha difundido la imagen del alcalde de Caquiaviri (Departamento de La Paz), en la que la autoridad es mostrada públicamente con indumentaria femenina (pollera y manta). De acuerdo a lo que se conoce, la fotografía fue tomada en virtud al castigo que le hubieron dado los comunarios de la provincia Pacajes supuestamente porque no se destinó recursos que correspondían a una comunidad. Esta “humillación” sería una de las sanciones más comunes en contra de autoridades ante diversos tipos de incumplimiento, si repasamos el caso de los municipios del departamento de Potosí, también se ha observado situaciones similares en nuestro pasado reciente.

Una dimensión delicada que debe abordarse a este respecto es que en la comprensión de muchas comunidades vestirse de mujer resulta un castigo y una grave humillación después de la cual, el afectado incluso se ve obligado a abandonar su comunidad, su cargo público e incluso hasta su familia. Esta medida se aplica como si se tratase de una acción emergente de la Justicia Comunitaria, pero se debe aclarar que no lo es.

Las víctimas, esperando que algún otro comunario apareciera a esa hora para alertar del robo, esperó un vehículo sobre la avenida hasta que un trufi salió con pasajeros de la zona y se toparon que el sospechoso viajaba bien sentado en el taxi como si nada hubiera pasado. Molestos por la acción, el acusado de robo fue llevado a golpes hasta una comisaría de Visito, donde fue golpeado para que confiese sus robos. Muchos de ellos, incluso hicieron una fogata para intentar quemarlo pero optaron por vestirlo de mujer.

Circular por la calle vestido como una mujer. Ésa fue la condena que un juzgado impuso a un hombre en la ciudad de Marivan, en el Kurdistán iraní. El 'reo', que el pasado 15 de abril fue paseado en la parte trasera de una camioneta y escoltado por seis agentes y varios coches de policía, vestía una falda y un pañuelo rojos acorde con la moda de las mujeres kurdas.

La indignación de la sociedad kurda no se ha hecho esperar. Lo que la justicia consideró una deshonra pública se ha convertido en bandera de una asociación feminista del país. La Comunidad de Mujeres de Marivan asegura haber sido insultada, ya que considera que ser mujer no es ninguna humillación.

Las protestas se producen apenas días después que el alto clérigo Hojatoleslam Kazem Sedighi, sentenciara que “las mujeres que no se visten con modestia conducen a los jóvenes por el mal camino, corrompen su castidad y difunden el adulterio en la sociedad. Como consecuencia esto aumenta los casos de terremotos”. La afirmación se produce tras que Irán sufriera el terremoto más grande en medio siglo que dejó al menos 46 muertos.

La condena del imán –cuyas palabras sientan jurisprudencia- siguieron a las del ministro de Bienestar Sadeq Mahsooliu quien convocó a rezar y suplicar a Alá como “fórmula para repeler los terremotos”, y advirtió que “Dios ha creado ese sistema que consiste en evitar los pecados, en orar, pagar limosna y el sacrificio”, como la mejor forma para prevenir los sismos.

Las campañas como esta son tan efectivas porque los símbolos de la feminidad realmente se ven ridículos para los hombres. Y eso obliga a las personas a darse cuenta de que son ridículos punto.

Tenemos fotos exclusivas de tus celebridades masculinas preferidas posando de manera llamativa, divertida y muy poco masculina. El nuevo libro Red-Blooded American Male, del fotógrafo ganador del Premio Emmy Robert Trachtenberg, tiene 100 deliciosas y sorprendentemente ... sexy fotos de celebridades masculinas.

Desde Judd Apatow hasta Neil Patrick Harris, Trachtenberg presenta los lados vulnerables y suaves de las celebridades masculinas al fotografiarlas en posturas tradicionalmente femeninas. En lugar de fotos habituales de caras estoicas y músculos flexionados; tiene fotografías desnudas, peculiares y llenas de emoción.

Un poco autocrítica, las fotos desafían la masculinidad al invitar al espectador a ver la naturaleza femenina de sus queridas celebridades. Destruye la pared de ladrillo resistente de la masculinidad y nos permite cambiar la forma en que solemos ver a las mujeres como pasivas sin darnos cuenta y los hombres como activos en las fotografías. ¡Estas magníficas fotos son un llamado a todos los hombres para que adopten su lado divertido y sensible!

"Lo siento por ti cuando se convierten en adolescentes". "Amigo, estás rodeado de mujeres". "¿Qué hiciste para merecer eso?"

Como soy padre de cuatro hijas (también tenemos un hijo), escucho cosas como esta casi a diario. Y, sinceramente, soy yo quien siente pena por las personas que piensan de esta manera.

Tener hijas es una de las mejores alegrías que podría imaginar. Tenemos un dicho en nuestra casa que dice así: "Te amo más hoy que ayer". Criar a las niñas es un privilegio, no una carga.

Recientemente, llevé a mis hijas de 10 y 6 años a sus "visitas de rutina" a la consulta del pediatra. Nos metimos en una habitación no mucho más grande que una despensa, donde fueron debidamente pesadas ​​y medidas, y elogiadas por comer frutas y verduras, minimizar el tiempo frente a la pantalla y participar en una hora de actividad física cada día. Al final de la cita, la enfermera, que había pasado la última hora corriendo a través de una rúbrica detallada diseñada para medir la salud de las chicas, se detuvo al escanear sus gráficos digitales, parpadeando en la pantalla.

"Ah, ¿también tienen una hermana mayor?", Preguntó, sacudiendo la cabeza y cerrando la computadora portátil. "Lo siento por su padre".

Sus palabras colgaron en la habitación donde los únicos otros sonidos eran la punta roma de mi hija mayor rasguñando contra una guía de estudio que tuvo que completar para un examen al día siguiente y la hija menor hurgando en sus pantalones mientras volteaba la página en un viejo cuestión de los aspectos más destacados.

Estudié las caras de mis hijas para asegurarme de que el comentario compasivo de la enfermera con respecto a su padre no se había registrado. Mi hija menor siguió vistiéndose y se dejó caer al suelo para asegurar sus zapatos. Su hermana mayor se frotó la nariz e indicó un pañuelo de papel.

Parece que no lo oyeron.

La enfermera levantó la vista. Esperó que valiera su opinión, que me convirtiera en cómplice de una broma insípida, que no solo había degradado a mis hijas por ser niñas de la misma familia, sino que también había devaluado su relación amorosa y cercana con su padre.

Mi desconexión tuvo su efecto deseado. Mientras recogía en silencio mi bolso y guiaba a mis hijas por la puerta, ella trató de retroceder. "Estoy segura de que realmente los ama", tartamudeó, mientras nos dirigíamos hacia el pasillo.

Este no es mi primer rodeo. Me he encontrado con este tipo de excavaciones, ad nauseam, desde que di a luz a mi tercera niña. Comprenden una banda sonora sin fin, el estribillo de una fiesta de compasión pública. Casi en todos lados, una caminata en un sendero de montaña, un restaurante, un museo de arte, siguen comentarios no solicitados sobre el mismo sexo de mis hijas.

"¿Tres niñas? Eso debe ser un infierno ", declaró un caballero una vez, mientras hacía cola en la tienda de comestibles. En ese momento, mi hija mayor tenía 7 años. Sus oídos se habían animado ante la maldición (infierno )...

Podrías pensar que la llegada de un bebé es una ocasión para la alegría pura. Y lo es, a menos, por supuesto, que el recién nacido sea una niña.

Lo sé por experiencia. Desde el nacimiento de mi segunda hija hace seis semanas, he tenido un flujo constante de piedad en mi camino.

Y viene de todas partes: el dueño del café local, Facebook, incluso los representantes del servicio al cliente sienten la necesidad de compadecerse. Tanto hombres como mujeres, desde aquellos que ya soportan la carga aparentemente onerosa de tener hijas hasta aquellos que solo pueden sentir empatía desde la distancia, han influido en mi lamentable aprieto.

Las notas de tristeza casi siempre son bien intencionadas y significan una broma. Pero la regularidad y la facilidad con que se elaboran pueden indicar cuán poco han cambiado nuestras actitudes hacia las hijas en, digamos, 4000 años.

El tipo de clichés de conmiseración se puede dividir en cinco categorías...

Barry Egan (Sandler) es dueño de una empresa de desatascadores para baño y otros artículos parecidos. Tiene siete hermanas insoportables que a menudo lo ridiculizan, y lleva una vida muy solitaria y en ocasiones sufriendo ataques de ira. Una mañana, después de presenciar un extraño accidente, se encuentra con Lena Leonard (Watson), quien provocó el encuentro intencionalmente después de verlo en una foto familiar de su hermana Elizabeth (Mary Lynn Rajskub), una compañera de trabajo de Lena. Al mismo tiempo, una noche, Barry llama a una línea de sexo telefónico, lo que luego se transforma en un problema ya que la operadora lo amenaza e intenta extorsionarlo. Esto complica su relación con Lena, como también su plan de explotar un error en una promoción de “Healthy Choice”. Después de que Lena se marcha a Hawaii en un viaje de negocios, Barry decide seguirla, pidiéndole la ubicación a una de sus manipuladoras hermanas.

Es el único punto de interés en su vida insoportablemente triste, que se vuelve más infeliz por su incesante intimidación a manos de siete hermanas autoritarias. En una fiesta familiar, las mujeres inmediatamente comienzan a burlarse de Barry acerca de cómo solían llamarlo “chico gay”, y lo mofan de cómo una vez rompió el cristal de una ventana con un martillo en una rabieta, un evento que afecta no recordar, pero es claramente una herida psicológica que se abre de nuevo con cada reunión familiar - y la noche termina con él rompiendo una ventana otra vez antes de confesarle a su cuñado que tiene un problema con “llorar”.
Realmente es una escena brillante. Barry es … bueno, ¿qué? Borderline autistic y obsessive-compulsive, con serios problemas de manejo de la ira y un desorden conductual peligroso que en el mundo real le daría un boleto de ida a la habitación de goma.

O Brother, Where Bart Thou?, titulado, Oh hermano, ¿Donde estás? en Hispanoamérica y España, es el octavo episodio de la vigesimoprimera temporada de la serie animada Los Simpson https://es.wikipedia.org/wiki/O_Brother ... rt_Thou%3F

Después de la Segunda Guerra Mágica, Ginny se convirtió en una jugadora profesional de Quidditch para las Arpías de Holyhead. Al retirarse de las Arpías, Ginny se convirtió en la corresponsal principal de Quidditch para el Diario El Profeta .

4 A pesar de que el gobierno reconoció en 1986 la explotación s*xual como una ofensa y estableció una ley de tráfico inmoral, alrededor de 200 niñas y mujeres son cada día introducidas en el negocio del tráfico ilegal de personas en India. Según diversas ONG, la extrema pobreza, la tradición cultural y religiosa, la falta de educación o una prematura viudedad son las causas principales de este problema que termina, en la mayoría de los casos, en la prostitución. Para combatirlo, la organización It will be creó el 2016 un programa de microcréditos, a través del que 103 mujeres han logrado ser autosuficientes e independientes y capaces de subsistir por sí mismas de forma digna.

5 El matrimonio infantil y el feticidio femenino son otros de los problemas a los que se enfrenta la sociedad hindú. Desde 2001, se prohibió en el país el matrimonio infantil con una ley que fija en 18 años para las mujeres y 21 para el hombre la edad mínima para contraer matrimonio. Pero Unicef advierte de que esta práctica sigue existiendo, sobre todo en el entorno rural, donde se producen un 56% de los casos. En relación al feticidio femenino, la ley también regula desde 1994 las técnicas de diagnóstico de preconcepción para revelar el sexo del bebé antes de su nacimiento. Los abortos selectivos en función del sexo, sin embargo, todavía se producen.

De Perdida de Gillian Flynn
“Ser una tía guay significa que soy una mujer sexy, inteligente y divertida a la que le encanta el fútbol, el póker, los chistes guarros y que eructa, que juega a los videojuegos, bebe cerveza barata, le gustan los tríos y el delicioso por atrasito, y se atiborra de perritos calientes y hamburguesas como si estuviese protagonizando la mayor o*gía culinaria del mundo, mientras, de alguna forma, consigue mantener una talla XS, porque las tías guays son por encima de todo sexis. Están buenas y son comprensivas. Las tías guays nunca se enfadan; solo sonríen con desazón, de una forma encantadora, y dejan a sus hombres hacer lo que les dé la gana […].

Los hombres creen que esta chica existe. Quizá estén engañados porque hay muchas mujeres que están dispuestas a fingir que son esa chica. Durante mucho tiempo, las 'tías guays' me han irritado. Veía a los hombres –amigos, compañeros, extraños– atontados por estas horribles mujeres falsas y quería sentarlos y decirles calmadamente: 'No estas saliendo con una mujer, estas saliendo con una mujer que ha visto demasiadas películas escritas por hombres socialmente ineptos a los que les gusta pensar que este tipo de mujer existe y que les besará'.

La cuestión de si este estereotipo de mujer está haciendo más daño al género femenino que el estereotipo de la Barbie tonta merece al menos un debate. Porque la tía guay, en muchas de sus acepciones, no deja de ser más que un Barbie con una litrona pegada la mano: una Miss Universo de Brooklyn o Malasaña (ponga aquí el barrio que usted considere); una especie de ser híbrido que incrusta los valores emocionales y sociales del colega masculino perfecto en el cuerpo de una top model.