19940
por Lana
Reina de Rancia
A ver, lo ideal es tener ayuda tanto en casa como con los niños, pero no siempre se puede, claro. Nosotros hasta ahora solo hemos tenido ayuda familiar con los niños y han sido cosas puntuales (salir a cenar nosotros dos, cuando se han puesto malitos, hacer alguna gestión, etc).
Nosotros también intentamos tirar lo mínimo de abuelos.
Ayuda con la casa no hemos tenido prácticamente nunca (solo una temporada hace años), porque más o menos nos íbamos apañando (y mi marido siempre ha sido muy reacio a pagar por ese servicio) pero a partir de septiembre eso va a cambiar.
Yo empiezo en un nuevo trabajo, con cambio radical de sector y mejores condiciones, y tengo clarísimo que voy a llamar a alguien que venga un par de veces por semana a limpiar, mínimo. El poco tiempo libre que me quede paso de gastarlo en quitar mierda. Prefiero pasarlo con mis hijos, mi marido y empapándome de todo lo referente a mi trabajo, que empiezo de cero, han confiado en mí y quiero hacerlo bien.
Con un un hijo solo, la ayuda viene bien, pero quizá no sea tan indispensable; depende también del carácter del niño, flexibilidad laboral que se tenga, etc. Pero a partir del segundo yo lo veo totalmente necesario. Eso, o reducción de jornada, excedencia, etc. La cuestión es que siempre nos toca palmar pasta.