Es una reducción al absurdo, es evidente que los judíos como persona serán cada uno de su padre y de su madre, pero los judíos como pueblo bíblico pobechito mío, elegido por el señor y por tanto cargadito de razón, pero todos malos malisimos con ellos, rechina. Y en la breve existencia del estado de Israel, me temo que se han coronado. Antes se podía alegar que eran una pobre buena gente que sin comerlo ni beberlo estaban siempre en conflicto y como víctimas. Era posible, curioso pero posible. Pero es que en cuanto han tenido poder lo han aprovechado para la tortura y el genocidio, de qué me suena eso? Y como han accedido al poder mediático y militar en EEUU, encima han conseguido amordazar y lobotomizar a la población mundial porque ellos siempre víctimas, nunca verdugos, cuando es al revés.Grannoche escribió: 08 Oct 2023, 11:36 Bueno, ya me perdonarás pero el razonamiento de tu primer párrafo es bastante horrible. Algo habrán hecho los judíos, y las mujeres, los homosexuales, los negros...
Y a los estados árabes Palestina se la pela lo más grande, puro postureo y cada vez más países ni siquiera eso.
Por supuesto que Palestina está vendida y nadie mueve un dedo por ellos desde hace décadas. Y yo no defiendo ni el terrorismo ni la guerra sucia que hacen a menudo, porque matar inocentes siempre es injustificable, pero qué les queda? Ha habido numerosos periodos de tregua por no llamarla paz en la que no ha cambiado una mierda para ellos, peor, todavía los metieron más en un puño. Nadie les ha dejado negociar nada, nadie les ha concedido nada, si han parado de matar los beneficios han sido solo para el lado de Israel porque ellos no han conseguido nada, ni por las buenas ni por las malas. Yo supongo que han llegado a tal punto de desesperación que van a por todas y a morir en el intento y lo más probable es que Israel aproveche esto para barrerlos del mapa, achicar aún más las franjas y meter más colonos hostiles en casa del otro y la comunidad internacional dándoles más besitos en el culito, porque pobriños, tan wenos que son y lo malos que son con ellos. Esta vez no hace falta que nos cuente la Biblia o los libros de los monjes de los Reyes Católicos como ha ido la cosa, lo hemos visto con nuestros propios ojos.