Culculina escribió: 27 May 2022, 12:36
datenshiblue escribió: 27 May 2022, 12:28
Yo lo hacía de 14 de la tarde a 8 de la mañana. No lo pasaba mal, ni me ponía de mal humor, ni nada por el estilo. Ni mucho menos se me veía demacrada. Estoy acostumbrada a comer poco de siempre y casi nunca ceno, y la verdad es que no noté mucha diferencia con estar menos horas sin comer. Me levantaba con mucha energía, desayunaba y en el trabajo rendía super bien. El problema fue que tras una semana o así empecé a encadenar migrañas a diario y tardé unos días en darme cuenta del motivo. Dejé el ayuno y empecé a hacer una merienda cena después de terminar de trabajar a las 18-18:30 y ayuno desde esa hora hasta el desayuno. Con eso se me regularon los dolores de cabeza y la verdad es que me noto menos cansada de lo habitual. Supongo que influye también que he perdido peso y ganado forma física.
Lo que pasa es que es un estilo de vida poco compatible con tener vida social, pero vamos, como estar a dieta estricta que es la historia de mi vida.
Pero si lo hiciste sólo una semana y eso ya te causó migrañas encadenadas para mí no es compatible con decir que te sentaba bien, es que claramente no lo hacía.
Mucha gente habla de la energía extra que se tiene cuando se ayuna pero es que eso es el cuerpo poniéndose en modo supervivencia porque ve que estás en una situación de falta de recursos y tiene que invertir la energía que queda en espabilarte precisamente para que te busques las castañas. Es una falsa sensación y a largo plazo es malísima. La privación de comida tiene efectos similares a la privación de sueño (que por desgracia conozco bien), puedes sentirte a tope en un momento puntual pero no es verdad que estés más enérgica y a largo plazo tienes riesgo de diabetes, problemas cardíacos, ...
Que hace años también estuvo muy de moda, como el sueño es lo contrario de la alimentación (lo ideal es sólo una vez al día todo de golpe) lo que se defendía como la gran revolución en salud era el sueño polifásico: dormir cuatro o cinco siestas de hora y media repartidas a lo largo del día. Con todo un discurso científico detrás también de que si el cerebro estaba preparado para dormir hora y media por las fases REM así que era mucho más natural dormir así que siete u ocho horas seguidas, que el sueño normal te dejaba atontada, ¿no notas que cuando te levantas sigues teniendo sueño?; que ya verías el chute de energía si empezabas a dormir en polifásico, ... Hoy en día se ha quedado en nada, tan panacea parece que no era.
A ver, yo tengo migraña crónica y es una práctica desaconsejada si sufres esta enfermedad, porque la migraña y muchas horas sin comer no son compatibles. Tampoco es compatible (la migraña) con casi cualquier cambio de rutina en la vida diaria. Si estás acostumbrado a comer mucho, empezar a comer poco, causa migraña, y al revés, si estás acostumbrado a comer poco, cuando comes más de la cuenta, también migraña. Eso no hace que sea algo que causa problemas, sino que es incompatible con una enfermedad crónica en concreto. También un sol espléndido, un olor concreto, o la lluvia o el chocolate negro pueden causar migraña y eso no convierte el sol, el perfume, el chocolate negro y la lluvia en cosas malas para la salud.
El ayuno está más que demostrado que no tiene consecuencias negativas sobre la salud, siempre que hagas una dieta equilibrada y correcta durante las horas en las que comes. Porque tú estás hablando de privación de comida, pero el ayuno intermitente no es eso. Si tu dieta es de x calorías, comes esas x calorías repartidas entre una serie de horas. No es que te comas una manzana para desayunar y el resto del día estés a cafés solos y tés para vivir. O que te comas seis hamburguesas y tres paquetes de galletas para aguantar 16 o 18 horas sin comer. Cualquier extremo es malo.
Lo que hacen las horas de ayuno es disminuir los niveles de azúcar en sangre y mantenerlos bajos, por lo que es bueno para las personas que, sin ser diabéticas, son resistentes a la insulina (por ejemplo, muchas mujeres con SOP). Los niveles de azúcar se mantienen en límites adecuados más fácilmente que cuando comes muchas veces al día, aunque sean comidas pequeñas, que tienes al páncreas sobre-trabajando.
Obviamente, si vas a llevar una vida super activa, haciendo mucho deporte y gastando mucha energía, no es una práctica recomendable, porque la energía viene de la comida y hay que suministrarla al cuerpo cuando lo necesita. Si la persona va al gimnasio a machacarse a diario, el ayuno no es para ella, por ejemplo. Si va tres veces a la semana, pues si lo hace los otros 4 días puede favorecer una perdida saludable de peso (si es su objetivo, eso depende de cuántas calorías se comen frente a las que se gastan, al final) y unos niveles bajos de azúcar en sangre.
Y yo creo que no es una práctica más habitual porque es incompatible con tener vida social, ya lo he dicho antes.
A mí no me costaba hacerlo, pero es verdad que yo soy muy disciplinada y tengo mucha fuerza de voluntad. Tampoco me cuesta desayunar una tostada mientras Mr. Daten se come un donuts y galletas. O beberme una botella de agua mientras él se aprieta una cerveza con tortilla de patatas
No sufro por la comida desde hace ya muchos años.