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por Culculina
Origen
Yo con lo de los sentimientos propios y tal tengo opiniones encontradas que ya he comentado alguna vez por aquí. Creo que es muy positivo que nuestra generación haya empezado a fijarse más en lo que cada uno siente, a hacer introspección, a hablar libremente de sentimientos y a preocuparse por la subjetividad propia. En temas como el feminismo esto ha sido clave, es muy importante poder analizar las vivencias y sentimientos de cada uno desde otro punto de vista que no sea el dominante y falsamente universal.
Pero también creo que a veces se peca de exceso, se nos ha ido un poquito de las manos, sobre todo aumentado por las redes sociales. En esto opino como en el tema del físico y el espejo: si te miras durante demasiado tiempo a ti misma acabas perdiendo la perspectiva, sacándote defectos mínimos y dando importancia a detalles que si no los mirases tanto ni siquiera notarías que están ahí y eso no tendría ningún efecto en tu vida. Me parece que la gente se está autoanalizando hasta un punto que lo que en principio era algo positivo se está volviendo en su contra. Conozco a gente que literalmente dedica todo su tiempo a hacer que el mundo gire alrededor de su ombligo, es una pasada. Hasta las cosas que les pasan a los demás sólo adquieren relevancia por cómo les hacen sentir a ellas mismas (por ejemplo, que haya problemas en el mundo es una putada porque me pone muy triste, que digo yo, será una putada para la persona que sufre esos problemas antes que nada, ¿no?).
Al final es una mezcla de hipersensibilidad y al mismo tiempo de cero sensibilidad, no sé si me explico. Se es muy sensible a lo que pasa alrededor pero sólo en tanto que afecta a uno mismo. Yo qué sé, pongo un ejemplo real que le ocurre a alguien que conozco, la opresión de los inmigrantes sin papeles está muy mal porque a veces veo a la policía atacándolos y cuando llego a casa por la noche no me encuentro bien y entonces voy a hacer introspección para saber por qué las cosas me afectan tanto y cómo puedo hacer para desconectar. Me deja muy loca esta actitud. Si te revuelve las tripas lo mal que está el mundo o te lo tragas y lo aceptas como normal, o haces algo para ayudar a esa gente. No haces terapia para ti misma para poder vivir con ello mejor y aún encima lo cuentas como una oportunidad para crecer como persona, es un sinsentido y tener poquísima empatía aunque la propia persona lo entienda justo como lo contrario. Lo mismo con las opiniones de odio que tanto abundan en los últimos años, resulta que lo que hay que hacer es terapia para poder escuchar a un fascista que te diga que las feministas se merecen que se las viole con calma y sin alterarte, ¿perdona? ¿Para qué quieres hacer eso? No sé, es todo yo yo yo, yo voy a ser mejor persona y más resiliente, yo no voy a dejar que me amarguen las cosas, ...
En fin, creo que he desvirtuado un poco el tema y aún encima dobleposteo pero es que estoy calentita con esto porque tengo a gente cercana que está literalmente en una burbuja donde todo lo que existe es su culo. Creo que lo ideal sería quedarse en un punto intermedio entre dar relevancia a la visión y subjetividad propias y también no darse tanta importancia a uno mismo hasta hacerlo contraproducente.
Sobre el tema de la auto representación en internet me gusta muchísimo Jia Tolentino, tiene un libro sobre el tema, Trick Mirror, y muchas entrevistas en youtube hablando de ello.