https://elcomun.es/2021/02/23/el-global ... n-nacidas/
Un grupo de expertos de La Haya lleva más de cinco años empeñado en elaborar un protocolo que resuelva la cuestión de la filiación de bebés comprados en el contexto de los contratos de gestación subrogada internacionales. Pero no satisfecho con esa misión inicial, optó deliberadamente por ampliarla, abarcando ahora todas las etapas del proceso de subrogación, incluida la elección de la madre «gestante» por los -también mal llamados- padres de intención o comitentes, los contratos, el consentimiento, los intermediarios y los aspectos financieros.
¿Qué es lo que ha llevado a La Haya a contradecir los principios rectores -el interés superior del menor a mantenerse en su familia de origen, el respeto a sus derechos fundamentales, la prevención contra la venta y el tráfico de niños- de sus propios convenios, como el Convenio de 1995 relativo a la Protección del Niño y a la Cooperación en materia de Adopción Internacional?
Si echamos un ojo a los 24 países representados en ese grupo de expertos, encontramos respuesta a esa pregunta: la mayoría de esos países son reguladores de los vientres de alquiler o tienen sobre la mesa propuestas de legalización de esta práctica; y no es casual que sean precisamente los representantes de esos países los más beligerantes en sacar adelante el protocolo de La Haya sobre el reconocimiento de las decisiones judiciales extranjeras en materia de filiación en relación a los contratos de «gestación subrogada» internacionales. Si a esto añadimos que varios de los integrantes del grupo están involucrados profesionalmente en la industria del alquiler de vientres, es fácil adivinar de qué lado se inclina la balanza o, en román paladino, de qué pie cojea dicho grupo de expertos.