Acudo al llamamiento de nube y hago repaso de mi verano y declaración de intenciones para Septiembre:
EJERCICIO: He hecho, pero muy poco. Solo voy al gym dos días a la semana y estoy pensando en ir dos más. Me da palo por el tema pandemia global en todo su auge, pero el cuerpo me pide pesitas rosas. De todas formas esto no me preocupa, voy dos días entre semana e iré dos días el finde y ya está. Pero me gustaría sacar tiempo para hacer más ejercicio al aire libre. Ahora mismo mis opciones son hacerlo a las 6 de la mañana o a última hora de la tarde, lo segundo lo doy por imposible, me lío a hacer cosas y para cuando me doy cuenta son las 9-9 y pico y a esa hora lo que hago es cenar. Por la mañana sí puedo, pero he estado perezosa. Como ya empieza Septiembre creo que me costará menos cambiar el chip y volver a hacer cardio matutino.
ALIMENTACIÓN: Genial. Creo que 2020 es el año de mi vida en el que mejor estoy comiendo en todos los sentidos. Soy capaz de comer muy sano y variado cosa que antes no pasaba, comía sano pero limitando muchísimos alimentos y eso me amargaba la vida. Además, cuando salía de ahí evidentemente me inflaba porque no era un patrón sano y normal de alimentación. Así que ahora estoy súper contenta, salgo a cenar y no me excedo porque el cuerpo no me lo pide, me como una pizza pero no devoro ni estoy ansiosa, soy capaz de dejarme un trozo en el plato si no puedo más, cosa que antes JAMÁS pasaba. Comía hasta reventar porque el resto del tiempo “no podía”.
VIDA SOCIAL: Todo lo bien que la pandemia lo permite. El cuerpo me pide un buen perreo pero no se puede, así que bueno, salgo a cenar y poco más. Lo que más contenta me tiene es que he vuelto a salir un montón con mis amigas del cole, las de toda la vida. Sin embargo a los de la uni no los veo desde finales de julio. Planeaba dar una fiesta en la piscina a este finde pero no se ha podido. Y me apetece un montón que nos veamos, en Septiembre ya será otra cosa, todos volvemos de las vacaciones.
También tengo planeado ir en Octubre a Brujas a ver a mi mejor amiga y a Italia a ver a otra de la carrera. Eso si no nos confinan, claro
RETOS: Empecé a principios de mes en un trabajo nuevo y aunque estoy súper contenta, mentalmente los primeros días fueron agotadores. Además trabajo en inglés y a veces me cuesta entender a ciertas personas con ciertos acentos por teléfono.
Tengo que hablar con mucha gente del Middle East y del Norte de África.
Confío en acostumbrarme, pero de momento a veces me genera algo de estrés. Así que mentalmente no he hecho mucho más. Mi idea es retomar la lectura de una santa vez y creo que voy a empezar a ir a la Biblioteca Regional que la tengo al lado de casa. Quiero coger ese hábito de ir con cierta frecuencia, al menos una vez al mes.
Otro tema pendiente es empezar con un tercer idioma. Me saqué el B1 de francés hace unos años y lo tengo muy oxidado. Me gustaría ponerme con el B2. También querría empezar con el italiano. Pero de momento está en standby, lo veo más de cara a 2021. Lo que sí he pensado hacer, mientras tanto, es consumir ocio en ambos idiomas, que siempre ayuda.
Quiero limitarme el tiempo del móvil, especialmente en Twitter. Y dedicarle más a YouTube, que he seguido canales especializados que me interesan y ahí están los vídeos, guardados en la carpeta de Ver más tarde cogiendo polvo.
También querría sacar tiempo para hacer algo que me encantaba hacer cuando era más pequeña, los moodboards. Me encantaba, y me gustaría tener un cuaderno dedicado solo a ello, que online hay mucho material pero a mí me gusta hacerlo en plan manualidad
No me animo porque al final es pasta que gasto en imprimir y tal, pero bueno, a ver si arreglo mi iPad y busco alguna app chula.
Creo que nada más.
Edito que se me había olvidado.
SUEÑO: Lo peor de todo con diferencia, como siempre en verano. A mí me despierta cualquier luz o sonido y dormir con la ventana abierta es un suplicio. Los tapones no hacen nada. Voy tirando y me acuesto a las 11:30 (me levanto a las 7:15) pero nunca es sueño profundo del tirón, me despierto mínimo 2-3 veces. Anoche por fin dormí con la ventana cerrada porque hacía frío y madre mía, qué felicidad.
No sé qué hacer la verdad, me niego a medicarme y las infusiones y demás no me ayudan en nada, no tengo problemas para relajarme y conciliar el sueño, pero los ruidos de la calle me despiertan. Doy gracias de que aún así no vivo en una zona ruidosa y vivo en un sexto, pero entre el camión de la basura, algun coche/moto y mis amables vecinos que todos los días mantienen relaciones s***ales apasionadas en torno a las 3-4 de la mañana (tambien están con la ventana abierta, de hecho hasta cuando tosen se les oye, imaginad el sexo, pues eso, que no duermo del tirón. EN FIN. Ya queda poco.