En mi casa ya damos por perdido un sillón de esos de estructura de madera de Ikea. Es oficialmente del gato, que se pasa los días enteros durmiendo en él. Desde el día en que el sillón entró por la puerta, además. Le encanta ese sillón, no hay nada que hacer

Yo también la tuve hace años con una "amiga" porque quedamos varias para cenar en mi casa, ella sabiendo que tenía gato vino, yo ya le avisé que el gato se subía a donde él quisiera y pululaba por donde él quisiera, porque es su casa también. Aun así vino, y ya una vez aquí pretendía que lo encerrase, que es que le daba "asco" que le rozara. Pues mira, te jodes, ya sabes que hay un gato, ya te he avisado antes de venir que aquí el gato campa a sus anchas, antes tienes que pasar por encima de mi cadaver para encerrar al gato fíjate lo que te digo.

Otra cosa es yo qué sé, cuando viene algún técnico y se meten en medio del trabajo que está haciendo o tiene alergia, en esos casos sí que los encierro, pero es algo entendible. Aunque la mayoría me dicen que no les molesta, al contrario, se ponen a hacerles carantoñas, así que a no ser que estén todo el rato subiendo y bajando y se dejen la puerta abierta, no me hace falta encerrarlos.

Perracallejera aquí otra fan total de las sneakers bastorras. Tengo esas Buffalo en negro y rosa, y las Fila Disruptor en blanco. A mí también me parecen hiper cómodas, es mi calzado del día a día si no tengo algún evento más especial y me encantan con cualquier cosa: vestidos informales, pantalones ciclistas y camisa ancha-larga, shorts, pitillos...

Yo también la tuve hace años con mi cuñada. Ella odia a los animales (lo dice ella misma) y cuando mis dos sobrinos mayores eran pequeñitos (tipo 3-4 años) y venían a casa de mis padres (donde yo vivía en aquel momento) pues ella les enseñaba a darle patadas al perro.
Obviamente yo me enfadé y le dije que no se le ocurriese hacerle eso a mi perro y que en mi casa no se iba a fomentar el maltrato animal. La bronca que me cayó después por parte de mi madre fue ÉPICA.

Moebius vaya p*** desgraciada.
Lo siento, pero me he quedado a cuadros.

Pues todo el que pueda entrar en mi casa sabe que la reina y señora absoluta es mi perra. Logicamente no la dejo estar molestando si es un trabajador y de todas formas ella no es nada sociable, es desconfiadisima con la gente que no es familia. Pero vive en el sofá, pasea por el borde de la piscina a su antojo y entra con las patas pingando a la casa y te deja el suelo perdido... es una casa con perro a todos los efectos. Y como nadie tiene nada perdido en mi casa, si no le gusta sentarse en un sofá sobado o le molesta cualquier cosa al respecto, con no venir lo tiene resuelto. Y si tuviera gato sería igual, vaya. Es que es un miembro de mi familia y adulto además. Hemos marcado unas pautas de convivencia que nos gustan a los 3 y somos felices así. Nuestra casa, nuestras normas, nadie de fuera pinta nada en ese tema.

Moebius algún dia le dará una patadita a un perro grande y agresivo y lo peor es que el pobre animal encima pagará por los pecados de ella, pero por lo menos ahorrarán en zapatos y calcetines desde ese dia. Menuda desgraciada la madre

Tampoco le va a pasar nada al animal que sea por estar en una habitación un rato mientras hay gente. Alguna vez que he ido a casas con perros estaba deseando irme, paso de aguantar que un perro me esté oliendo y chupando. Y cuando les da por intentar subirse encima de ti y te arañan todas las piernas.

Castañuelas es que cuando vas a una casa ajena con un niño porculero no se le encierra para que no moleste a la visita. La visita se aguanta.

Pues con la mascota igual. Y si no gusta es tan fácil como quedar en otro sitio.

Tampoco veo normal que si te da miedo o no te gusta, los dueños no retiren a un perro que olisquea o se quiere subir a las piernas. Por pura educación y respeto.

Mi gato cuando hay visita desparece solo, pero si se diera el caso de acercarse a alguien que no le gusta, le llamo y punto.

Castañuelas escribió: 25 Ago 2020, 18:29 Tampoco le va a pasar nada al animal que sea por estar en una habitación un rato mientras hay gente. Alguna vez que he ido a casas con perros estaba deseando irme, paso de aguantar que un perro me esté oliendo y chupando. Y cuando les da por intentar subirse encima de ti y te arañan todas las piernas.

Dependerá del animal. La mia se angustiaria y se pasaría el rato rascando la puerta porque jamás se despega de nosotros cuando estamos en casa. Es muy insegura y no nos pierde de vista. Cuando vamos a trabajar o salimos a algún recado, lo entiende perfectamente, pero si estamos en casa está con nosotros. Si estamos en distintas habitaciones va y viene de una a otra cada poco a ver si seguimos ahí.

Yo no la dejaría acercarse a una persona a la que no le gustan los perros, entre otras cosas porque no me apetece exponerla a esa tensión que se daría entre ellos y no me gusta que nadie la toque o la tenga cerca si no se conocen bien, pero en mi casa la perra no se encierra en una habitación. Si alguien no es capaz de convivir con ella en el mismo espacio, no hace falta que venga por compromiso y esté deseando irse, es mejor que directamente no venga. Opino lo mismo que daten. A mí me ha pasado quedar con amigos con hijos asilvestraos que nos han dado la reunión y me he aguantado con toda mi paciencia porque son los hijos de alguien que me importa y eso merece mi esfuerzo, pero no se me ocurriria decirles "ya los podias haber dejado con la vecina". Si me fuera tan sumamente desagradable o insoportable intentaria queda con ellos en planes en los que no pueda haber niños o simplemente no quedaría, porque si uno tiene que pasar tantísimo mal rato, a lo mejor hay que aparcar un tiempo esa amistad

datenshiblue escribió: 25 Ago 2020, 18:30 @Castañuelas es que cuando vas a una casa ajena con un niño porculero no se le encierra para que no moleste a la visita. La visita se aguanta.

Pues con la mascota igual. Y si no gusta es tan fácil como quedar en otro sitio.

Tampoco veo normal que si te da miedo o no te gusta, los dueños no retiren a un perro que olisquea o se quiere subir a las piernas. Por pura educación y respeto.

Mi gato cuando hay visita desparece solo, pero si se diera el caso de acercarse a alguien que no le gusta, le llamo y punto.

Eso es. Primero que es su casa, luego que si no te gustan los animales no vayas a casa de alguien que tiene animales, será por sitios en los que verse. Y luego ya también entra en juego cada animal. El mafioso por ejemplo es super mimoso y le pide mimos hasta al psicópata del 5º ese que siempre saludaba, la novia de una amiga se unió a una cena en mi casa, no le hacen mucho tilín los gatos pero aun así vino, el mafioso iba a pedirle mimos porque oh, unas manos nuevas que me acaricien, y yo como sabía que a ella no le hacían mucho tilín los gatos pues llamaba al mafioso para que viniera conmigo a donde estaba yo y ya está, él me hacía caso, ella se quedaba tranquila, y al gato ya le hacía mimos yo, no pasa nada. Los otros dos es que ante visitas se esconden. Pero exigir que se encierre a una mascota solo porque no te gustan los animales pues mira, no, por ahí si que no paso.

A mí los perros me encantan, echo muchísimo de menos tener. Es que el vínculo y la complicidad son bestiales, no se puede explicar; cuando mi perra murió lo sentí como si hubiera muerto un familiar.
Y digo que echo de menos tener perro porque aunque ahora sí que tengo, son perros-gatos o peor, son unos engendros del demonio los jodíos

¿Las que tenéis gatos los dejáis subirse a la encimera de la cocina, la mesa y tal? Yo no soy particularmente escrupulosa, y creo que será impopular pero sí que me da asco que vayan poniendo las patas y restregando el culo por la encimera donde luego apoyo la cuchara que voy a usar para el café, el tomate que voy a cortar para prepararme la tostada y el trapo que voy a usar para secar un plato.

Castañuelas escribió: 25 Ago 2020, 18:29 Tampoco le va a pasar nada al animal que sea por estar en una habitación un rato mientras hay gente. Alguna vez que he ido a casas con perros estaba deseando irme, paso de aguantar que un perro me esté oliendo y chupando. Y cuando les da por intentar subirse encima de ti y te arañan todas las piernas.

Es que el animal está en SU casa y si tiene costumbre de estar en el sofá o donde sea, él no entiende que, de repente, se le encierre en una habitación y no pueda hacer su vida normal.

violetta* escribió: 25 Ago 2020, 19:06 A mí los perros me encantan, echo muchísimo de menos tener. Es que el vínculo y la complicidad son bestiales, no se puede explicar; cuando mi perra murió lo sentí como si hubiera muerto un familiar.
Y digo que echo de menos tener perro porque aunque ahora sí que tengo, son perros-gatos o peor, son unos engendros del demonio los jodíos

¿Las que tenéis gatos los dejáis subirse a la encimera de la cocina, la mesa y tal? Yo no soy particularmente escrupulosa, y creo que será impopular pero sí que me da asco que vayan poniendo las patas y restregando el culo por la encimera donde luego apoyo la cuchara que voy a usar para el café, el tomate que voy a cortar para prepararme la tostada y el trapo que voy a usar para secar un plato.

Si. Vaya, no es que les deje, es que son gatos, los gatos se suben donde quieren, no son perros Es tan fácil como limpiar la encimera antes de cocinar, y ya está. El trapo de paño lo cuelgo del asa del horno para que ellos no lo alcancen y no se llene de pelos, y la bayeta de la cocina la cuelgo del grifo y los gatos tienen mucho equilibrio pero tampcoo es que sean del circo del sol, así que al grifo no se suben. No hay mayor drama.

A quien le moleste una casa con animales lo que tiene que hacer es no ir, no exigir.
Una amiga tiene en su minipiso un pastor alemán. La casa huele a perro que marea, de verdad que es insoportable. No sé si por el perro o porque es dejada con la limpieza, el caso es que ahí yo no pude respirar. Lo que hago es no volver.

Claro, si por voluntad propia no voy a casas con perros así, cuando he ido ha sido obligada o por compromiso. Pero vamos, que si estás viendo que tú perro no deja de meterle el hocico en todas partes a tu invitada pues tendrás que hacer algo. Y si ponemos el ejemplo de los niños pues lo mismo, porque sea su casa no van a dejar los padres que el niño se ponga a tirarte de los pelos, por ejemplo.

Pero es que muchas veces no se va a casa de la gente por gusto o de visita, se va a trabajar. Yo tengo pavor a los perros y lo he pasado realmente mal en algunas casas.
Y entiendo que están en su casa y lo que queráis pero que no me chupe ni nada porque me puede dar una taquicardia allí mismo.

Castañuelas escribió: 25 Ago 2020, 19:15 Claro, si por voluntad propia no voy a casas con perros así, cuando he ido ha sido obligada o por compromiso. Pero vamos, que si estás viendo que tú perro no deja de meterle el hocico en todas partes a tu invitada pues tendrás que hacer algo. Y si ponemos el ejemplo de los niños pues lo mismo, porque sea su casa no van a dejar los padres que el niño se ponga a tirarte de los pelos, por ejemplo.

Tú has estado en pocas casas con niños pequeños, no?

Yo creo que una persona con dos dedos de frente sabe que su animal molesta o su niño molesta, pero no todo el mundo los tiene, por lo visto. Que a mí me gusten los perros no significa que quiera que un perro desconocido me sobe y me babe entera mientras estoy tomando café en casa de alguien o que no me importe que mi casa apeste a madriguera. Ni me gustan los perros que ladran, ni los que andan sueltos y se tiran corriendo a mi perra ni un montón de cosas, es que yo creo que una cosa es que te gusten los animales y otra que seas g*lipo**as.

Yo no tengo una casa impoluta ni de lejos y la perra duerme en mi almohada con el culo en mi cabeza porque es mi perra y solo me falta chuparla a veces, de lo boba que estoy con ella. Pero una cosa es el culo de mi perra y otra el culo de cualquier perro y una cosa es mi cabeza y otra la de la visita, no es tan complicado. Yo creo que cualquiera puede conseguir que una persona y un animal o un adulto y un niño estén en el mismo espacio sin que nadie se sienta acosado e incómodo, otra cosa es que tenga la educación y el sentido común de entenderlo.

Castañuelas escribió: 25 Ago 2020, 19:15 Claro, si por voluntad propia no voy a casas con perros así, cuando he ido ha sido obligada o por compromiso. Pero vamos, que si estás viendo que tú perro no deja de meterle el hocico en todas partes a tu invitada pues tendrás que hacer algo. Y si ponemos el ejemplo de los niños pues lo mismo, porque sea su casa no van a dejar los padres que el niño se ponga a tirarte de los pelos, por ejemplo.

Que no, dice Y ojo que como no le rías las "gracias" al nene te ponen cara de seta.

-M- escribió: 25 Ago 2020, 19:09

violetta* escribió: 25 Ago 2020, 19:06 A mí los perros me encantan, echo muchísimo de menos tener. Es que el vínculo y la complicidad son bestiales, no se puede explicar; cuando mi perra murió lo sentí como si hubiera muerto un familiar.
Y digo que echo de menos tener perro porque aunque ahora sí que tengo, son perros-gatos o peor, son unos engendros del demonio los jodíos

¿Las que tenéis gatos los dejáis subirse a la encimera de la cocina, la mesa y tal? Yo no soy particularmente escrupulosa, y creo que será impopular pero sí que me da asco que vayan poniendo las patas y restregando el culo por la encimera donde luego apoyo la cuchara que voy a usar para el café, el tomate que voy a cortar para prepararme la tostada y el trapo que voy a usar para secar un plato.

Si. Vaya, no es que les deje, es que son gatos, los gatos se suben donde quieren, no son perros Es tan fácil como limpiar la encimera antes de cocinar, y ya está. El trapo de paño lo cuelgo del asa del horno para que ellos no lo alcancen y no se llene de pelos, y la bayeta de la cocina la cuelgo del grifo y los gatos tienen mucho equilibrio pero tampcoo es que sean del circo del sol, así que al grifo no se suben. No hay mayor drama.

Hace poco pasé un mes o así con violetto y mientras estaba allí, su compañero y él acogieron temporalmente a un gato que se había perdido. Pues no paraba de subirse a la encimera de la cocina y a la mesa donde comíamos, que encima era bajita. Que a ver, puedes limpiar la encimera antes de cocinar, pero si pasa el día montándose a cada rato, no puedo estar limpiándola cada dos minutos. Quizá estoy cocinando, tengo las verduras sobre la encimera mientras las corto y el tío se sube, se acerca a olisquear el plato en el que he dejado algún ingrediente puesto, toca con el rabo la comida que anda por allí, yo qué sé, no me gustaba nada. Guardo muy mal recuerdo porque fue un poco la gota que colmó el vaso para que estuviera muy a disgusto en esa casa.
Nunca me ha gustado mucho los gatos, pero después de eso, más manía les he cogido

A mí ir a casa de alguien con animal y pedirle al dueño que lo encierre no me cabe en la cabeza. Otra cosa es que no le dejes acercarse a esa persona en concreto porque le tenga miedo, o simplemente porque no le guste. Pero de ahí a encerrarlos hay un trecho.