Vamos a ver, por favor, ya habéis comentado que hay hombres que pueden desarrollar cáncer de mama, lo sabemos todas porque, cada vez que empiezan las campañas sexualizadoras, los hombres no soportan que haya algo que no les centre a ellos y el mundo nos informa de que algunos también lo pueden sufrir. Esto es saber más o menos popular.
Como todo en medicina, es básico el sexo, el reconocer su existencia e informar a quien sea necesario y negarlo no sólo es estúpido sino peligroso. No son precisamente las feministas las que lo niegan.
Pero aquí de lo que se trata es de colonizar hasta el último reducto femenino y de obligar a que la ciencia de las mujeres, que es lo que literalmente significa ginecología, se ocupe también del sexo masculino.
Se llenan la boca acusando a las oprimidas de transexcluyentes e instrumentalizando a hombres trans para justificar su misoginia y desligar la palabra mujer del sexo pero no hablan de que la ciencia de las mujeres se tiene que encargar también y por igual de mujeres y transhombres porque se les cae la fantasía misógina que se han montado.
Y por cierto, ni siquiera gustó a estos misóginos.
Los trasplantes de útero son innecesarios y sólo se han hecho a pocas mujeres para que puedan cumplir con su función de tener hijos
una vez se consigue, se lo retiran porque lo rechazan. Implantárselo a un hombre es inútil y todavía más innecesario. Pero gallináceas femeninas y a la vez, mujer completa si tiene hijos, como decía Einar Wegener en los 30. Nada de envidia de útero que ver aquí tampoco.
La ventana Overton es una teoría política que describe como una ventana estrecha el rango de ideas que el público puede encontrar aceptable, y establece que la viabilidad política de una idea se define principalmente por este hecho antes que por las preferencias individuales de los políticos. Se denomina de esta manera por Joseph P. Overton, exvicepresidente del Centro Mackinac de Política Pública. Para cada momento, esta "ventana" incluye un rango de políticas aceptables de acuerdo al clima de la opinión pública, que un político puede recomendar sin ser considerado demasiado extremista para poder ocupar o mantener un cargo público.
Es una "noticia" cíclica