Yo lo conte en el difunto. La verdad que nuestros inicios fue súper bonito.
El amor de mi vida vino a buscarme a casa.
Un amigo en común se había empeñado en que presentarnos por temas profesionales y aprovechando que él veraneaba en san juan playa y yo vivía en Alicante.
Yo acababa de dar el paso de dejar de vivir con el padre de mi hijo pequeño ( llevábamos tres años ya durmiendo en habitaciones separadas) y la verdad me encontraba personalmente mejor que en años con lo cual en mi mente no estaba volver a tener pareja.
La verdad estaba en un momento sumamente tranquilo de mi vida
Por otro lado no me apetecía nada el compromiso en el que me había metido este amigo ya que aunque en algunos aspectos profesionales nos parecíamos, el jugaba en otra liga en la que yo no me sentía nada identificada, por lo que pensaba que sería un momento incómodo quedar y no saber ni de lo que hablar. Total que ya llevaba el dos semanas de vacaciones y yo eludía los intentos de conocernos en persona aunque ya llevábamos un mes sobretodo hablando por mensaje ( nuestro amigo nos presento por teléfono un día que ellos estaban tomando algo juntos).
Bueno en realidad, yo sólo era educada contestando mensajes y poco más. Pero bueno ya estaba empezando a quedar mal jajajaja y era sábado así que le mande un mensaje para tomar un granizado a las cinco de la tarde, nada de transnochar. El enseguida se apuntó al granizado y allí están súper puntual.
Yo que andaba tan tranquila y obviamente sin que en ningún momento se me pasara por la cabeza que con él pudiera surgir algún tipo de relación esporádica o estable. Solo lo había visto en la foto de su whatsapp y la verdad en ningún momento me había atraído.
Pero cuando baje y lo vi por primera vez esperándome abajo, buf, solo me acuerdo de su sonrisa.....
Aún así no pensé que a él pudiera gustarle yo.... como os digo no sé tía que tuviéramos nada en común más que algunos temas profesionales.
La cuestión es que estuvimos paseando durante horas, tomamos varios granizados y se nos hizo casi las dos de la madrugada, y cuando me llevo a casa fue como en las pelis, me acompaño a la puerta de la calle y cuando ya me iba me dio un beso sencillo. Yo que no supe cómo reaccionar porque no me lo esperaba me fui corriendo y ahí lo dejé jajajajaja. Más propio de una adolescente que de una mujer ya de 40 años que tenia en ese momento.
Después estuvimos hasta las seis de las madrugada enviándonos mensajes en los que el me dijo lo que había sentido y da tarde conmigo y en fin, fue todo un flechazo.
Al día siguiente volvimos a quedar, y se suponía que lo iba a llevar a conocer un poco alicante, así que a subir cuestas al castillo De Santa Barbara que lo lleve y no sé si fue porque no le hiciera subir hasta arriba ya que iba el pobre con la lengua fuera, en uno de los miradores me cogió de la mano y me dio un beso de esos largos, de película que te quitan el aire......
Desde ese momento nunca más hemos vuelto a separarnos. Los días que le quedaron en Alicante fue lo más parecido a una película de esas de amor de verano y no se pero creo que ambos perdimos algunos kilillos porque empezamos con muchas ganas jajajajaja.
La verdad que pienso que es la historia más bonita que he tenido, nunca hemos discutido a día de hoy, ni siquiera por “antoñita la fantástica” y su “strudel”. Que por cierto este finde le dio por volver a enviarle mensajes para ser su “amiguita” .
Llevamos más de cuatro de años súper felices, sobretodo porque nos aceptamos como somos. Siempre he dicho que si una persona tiene que cambiar para que alguien le quiera, no es amor de verdad.
Nos enamoramos de las personas con todo, virtudes y defectos. Y os aseguro que nosotros tenemos muchos pero nos reímos de ellos.
Buf! Vaya tocho os he escrito