Keren escribió: 18 Mar 2018, 22:59
Estoy muy de acuerdo con @Mar_nie en que tu mente se expande. Cuando fui por primera vez lo hice porque los hoteles eran demasiado caros para tantos días pero bastante a disgusto. Ahora ya duermo como un tronco, me cambio de ropa sin problemas...
A ver, no voy a mentir. Si me sobrara el dinero me iría un hotel de 5 estrellas. A todas nos gusta que nos hagan la cama y la comida, y tener una buena bañera en la que relajarte. Pero a cambio me resulta una experiencia muy divertida. También es verdad que a mi me gusta conocer gente de diferentes sitios. Una noche entera después de cenar me pasé intentando enseñar a pronunciar mi nombre a un grupo de indios jajaja Si eres de esa gente que visita los sitios más turísticos cuando va de viaje sin salirse de lo que está en las guías y ya, pues seguramente no sacarás nada en positivo de un sitio así.
mariam_ escribió: 18 Mar 2018, 22:40
Yo soy muy celosa de mi privacidad, pero este verano tengo previsto estar fuera unas dos semanas y la opción más económica es comparto habitación en un albergue. Lo véis cómodo para tanto tiempo? Me da miedo también el tema de las maletas, pero suelen tener taquillas?
Yo he estado un máximo de 9 días y al final te acomodas de una manera diferente a un hotel. Como estamos diciendo no tienes la misma privacidad pero llega un momento en que te levantas por la mañana, te vas a la cocina, saludas a la gente, te preparas el desayuno... y vas adquiriendo la sensación de pillar la taza de siempre y sentarte en la mesa de siempre como Pedro por su casa.
Todos los que yo he visto tienen taquillas aunque eso lo suele poner en la web para que puedas asegurarte. Las cosas de valor puedes ponerlas allí aunque yo nunca las usé. Móvil y monedero pequeño debajo de la almohada, de día en mi bolso/bolsillo y si alguien quiere robarme unos pantalones pues allá ellos. Nunca me pasó.
Keren, pienso que se disfruta cada cosa de diferente manera y que tener esa apertura mental ayuda a no estar tan limitado. Personalmente tengo una lucha conmigo misma porque nunca he dado el paso de ir a un hotel nudista teniendo miles de oportunidades pero mis líneas rojas las vivo como una especie de
incapacidad. La hoteles cinco stars ofrecen cosas que un albergue / refugio ni lo sueñes, y viceversa. Hay que saber tomar lo mejor de cada situación.
Tampoco a mí me han robado nada pero he compartido botiquín, chocolate negro, pasta de dientes...y, al principio, sólo tenía miedo de que alguien se prendara de mis botas de montaña. En el refugio de Collado Jermoso, por ejemplo, te las dejas fuera todo el tiempo y te pones unos patucones de goma tipo albarcas asturianas
que no te quitas hasta que retomas el camino. En cualquier caso, si llevas un pequeño saco de dormir que es muy útil en estos entornos, con meter dinero, tarjetas, documentación y móvil dentro, ya duermes como un lirón. De día siempre llevo una riñonera deportiva con lo más importante y va conmigo a todas partes. También tengo el hábito de tener una pequeña cantidad de dinero en un lugar que no sea el monedero. Una precaución que, de momento, sólo me ha dado tranquilidad pero a la que no he tenido que recurrir a Dios gracias...